El pleno del Ayuntamiento de Alcañiz aprobó ayer la cesión al Gobierno de Aragón de los terrenos donde se construirá el nuevo hospital de la localidad, que dará servicio a una población de 70.000 habitantes de varias comarcas del este de la comunidad aragonesa.

La cesión del solar donde se levantará la infraestructura sanitaria salió adelante gracias a los votos del Partido Popular (PP), que gobierna la institución municipal, y del PAR, que suman once concejales. Por el contrario, tanto el PSOE como Izquierda Unida (IU) se pronunciaron en contra de esta medida.

"Con la cesión a la DGA de los terrenos adquiridos por el ayuntamiento, el Gobierno autonómico ya puede empezar a mover la construcción del edificio", señaló ayer Ana Isabel Fernández, concejala de Hacienda en la corporación alcañizana.

En principio, las obras podría empezar dentro de siete meses, pero en realidad no existe todavía una fecha segura.

FORMA DE GESTIÓN El portavoz del PSOE, Manuel Ponz, explicó por su parte los motivos que habían llevado a su grupo a votar en contra. "No nos oponemos a que Alcañiz y su zona de influencia cuenten con un hospital, pero tampoco queremos extender un cheque en blanco a la DGA, que no ha desvelado sus planes sobre la futura infraestructura", declaró Ponz.

En este sentido, el portavoz socialista destacó que el consejero de Sanidad, Ricardo Oliván, no ha dado explicaciones sobre las características del nuevo servicio, lo que ha hecho correr rumores sobre su forma de gestión y también sobre el hecho de que quizá no cuente con una unidad de cuidados intensivos.

"Queremos que Oliva se digne hablar con nosotros y nos diga qué se va a hacer en Alcañiz, pues lo cierto es que una obra de este calibre ni puede ser de gestión privada ni puede carecer de unidad de cuidados intensivos", añadió Ponz.

Además, el portavoz de los socialistas alcañizanos insistió en el hecho de que su grupo no admitirá un hospital que no cuente con una gestión pública al cien por cien.

Los terrenos del hospital han costado 1,1 millón de euros, abonados a los distintos propietarios del suelo. Unos recibieron la cantidad estipulada en la negociación y otros recibieron un justiprecio al no haber acuerdo.