Un éxito rotundo. Solo así puede calificarse el estreno ayer del pontón sobre el Ebro construido para unir ambas márgenes entre la arboleda de Macanaz, cerca del puente de Piedra, y el Club Náutico. Una apertura al público que logró atraer a más de 15.000 visitantes, según datos de la organización, y que obligó a introducir numerosos cambios por la expectación suscitada durante todo el día. Sobre todo por la tarde, donde la afluencia fue tan masiva que llegó a obligar a dar paso alternativo en las dos riberas cuando sobre el tablero había más de 400 personas. Una circunstancia que se dio en varias ocasiones. Pero la mayor congregación de visitantes se produjo al final de la jornada, con la recreación histórica y los fuegos artificiales junto al río.

Una novia haciendo el reportaje de su boda sobre la plataforma, un hombre de 98 años que hizo la mili en Pontoneros y recordaba con emoción cómo se construían entonces pontones como el que ayer atravesaba... Muchas historias personales sobre un paso sobre las aguas del Ebro que no dejó indiferente a nadie. El buen tiempo animó a que la afluencia fuera aún mayor, especialmente por la tarde, cuando el calor era menos sofocante y muchas familias zaragozanas se acercaron a verlo.

Los voluntarios, apostados a ambos lados de la estructura sobre el río, veían como lo que iba a ser una visita guiada por grupos se convertía en un paso libre para todo el que se acercara, hasta alcanzar el aforo del pontón, que aguantaba hasta 50 toneladas pero que con 400 personas encima ya se ponía el límite.

Hacía 25 años que no se veía un paso en el río. Entonces se hizo para la celebración del Día de las Fuerzas Armadas y ayer la fiesta era para los vecinos, los zaragozanos que no se quisieron perder la cita. Hoy también podrán hacerlo, entre las 11.00 y las 14.30 horas por la mañana y de 16.00 a 22.30 por la tarde noche. Dentro de un programa que se prolonga hasta el próximo martes, cuando se cumple el aniversario de aquel 9 de julio de 1813 en el que se produjo una voladura como la que todos los ciudadanos esperaban ayer expectantes, el plato fuerte junto a los fuegos artificiales.