La nueva directora gerente del Servicio Aragonés de Salud, María Ángeles Alcutén, anunció ayer la convocatoria "para este año 2013" de los concursos de traslados pendientes. Lo hizo en su primera comparecencia en las Cortes, tras su nombramiento, el pasado mes de enero. Alcutén dijo ser "consciente" de que los concursos no se habían convocado aún y adquirió el "compromiso" de "abordarlos para todas las categorías".

Alcutén, que sustituye en el cargo a Tomás Tenza, imputado judicialmente en Burgos por sendos supuestos casos de acoso laboral y prevaricación, expuso las líneas maestras de su gestión. Dijo declararse "firme defensora de la sanidad pública" aunque, en línea con los postulados del PP, mostró la misma determinación para impulsar políticas sanitarias que contemplen el "equilibrio presupuestario, la contención del gasto y la eliminación del déficit", en un servicio que cuenta con un presupuesto de casi 1.500 millones de euros.

La responsable del Salud hizo especial mención a los profesionales sanitarios y a la política de recursos humanos, que ha de desarrollar "tres ideas clave": "la transformación en plazas de interinos del personal eventual de larga duración, establecer las ofertas de empleo público necesarias y un concurso de traslados adecuado y periódico".

LISTAS DE ESPERA Ante los diputados de la Comisión de Sanidad de las Cortes, María Ángeles Alcutén se jactó de que, aunque las listas de espera ofrecen "datos negativos", espera "reducirlos", gracias al "aumento del 15%" en la actividad quirúrgica que ya se da y a los "programas de concertación externa que vamos a poner en marcha en breve plazo".

La directora gerente del servicio se refirió asimismo a asuntos concretos, como a la centralización de los laboratorios, que "se hará si hay disminución de costes y no representan peor calidad asistencial" o la situación del hospital de Calatayud, en donde Alcutén negó que exista escasez de recursos humanos. "De hecho --afirmó-- allí no hay lista de espera quirúrgica".

Respecto a la atención domiciliaria a los enfermos anticoagulados, la responsable del Salud recordó que son solo cuatro las comunidades que prestan el servicio en casa y que, además, Aragón atiende a unas 800 personas. María Ángeles Alcutén recalcó que "durante el presente ejercicio se va a mantener, pero después valoraremos si hay evidencia científica de que la vía domiciliaria es mejor". De lo contrario, "el programa se suspenderá", añadió.

Por CHA, Nieves Ibeas advirtió de que "hablando de sostenibilidad y ahorro, se ha propiciado un empeoramiento del servicio", línea en la que insistió la diputada de IU Patricia Luquin. Eduardo Alonso, por el PSOE, cuestionó la capacidad de Alcutén para el cargo y el portavoz del PAR, Manuel Lorenzo Blasco, señaló la eficacia de la colaboración público-privada. La diputada del PP Carmen Susín alabó la gestión del Salud.