El colapso que se viene produciendo en Urgencias del hospital Miguel Servet de Zaragoza ha provocado la contratación, hace varios días, de alrededor de una decena de enfermeras para paliar las necesidades actuales. El nuevo personal eventual tiene contrato hasta el viernes 15, aunque prorrogable hasta el 28.

La estancia de las profesionales incorporadas se ubica tanto en la sala de observación número 3 como en la tercera planta de Traumatología, correspondiente a la especialidad de Cirugía Plástica. De hecho, esta fue la última que la dirección del centro decidió abrir para sofocar los problemas en Urgencias. Antes ya se había procedido a la apertura de las plantas 6 y 8, que también se encontraban cerradas, pero así como estas dos últimas poseen plantilla orgánica, la tercera --habitualmente vacía-- contó con la contratación de cuatro enfermeras.

Así, pues, el Servet habría reforzado dos escenarios importantes para reducir la saturación a la mínima expresión y no se habría visto en la obligación de abrir la segunda planta de Trauma, algo que solo se lleva a cabo en situaciones de emergencia, aunque desde el Departamento de Sanidad se asegura que la apertura se hará efectiva "en el momento que haga falta".

Sin embargo, desde el propio hospital se aseguró que ya se habían dado "varios casos" de pacientes que se habían visto obligados a permanecer durante más de cien horas en una sala de observación antes de ser ingresados.

El consejero de Sanidad, Ricardo Oliván, expuso a este respecto que el colapso de los servicios de urgencias de la comunidad, y, en concreto, el del hospital Miguel Servet de Zaragoza, "es el mismo que en años anteriores en estas mismas fechas" y recalcó que "estamos en una época, como todos los años, en la que se produce, cuando empiezan los primeros fríos, las puntas de gripe, y eso hace que todos los servicios de urgencia en los centros de salud y en hospitales se colapsen". Además, señaló que "esto ha sido así este año y los anteriores, incluso cuando no se hablaba de recortes".

La apertura de las tres medias plantas y los refuerzos contratados parecen haber reducido el colapso, aunque el malestar entre el colectivo de enfermeros continúa. A la difícil situación provocada por la gran demanda se une el hecho de que gran parte del personal admite que todavía no se le ha comunicado en qué consistirá la ampliación de su jornada laboral. "Aún no sabemos si tenemos que ir media hora más, o dos horas y media semanales, 5 cada dos semanas o un sábado de cada tres", advirtió una profesional, que recordó que la nueva normativa debía ponerse en marcha en enero.