Con la designación del líder de Podemos en Aragón, Pablo Echenique, y la diputada Erika Sanz en el nuevo Consejo Ciudadano Estatal de la formación, se abre un periodo de relevo, por la imposibilidad de que ambos duplique sus cargos orgánicos, que se abordará «con calma», según manifestó ayer la también integrante del consejo autonómico.

«Los documentos que han salido elegidos tienen que amoldarse a los territorios en una primera fase», indicó. Para eso solicitó «un periodo de adaptación», que confía en que «se abordará desde la calma y la responsabilidad, hablando con todas las partes».

Sobre la elección de Echenique como nuevo número dos, destacó que los afiliados han querido «reconocer su labor». De esta forma el líder aragonés ha quedado definido como nueva mano derecha de Pablo Iglesias, corriente en la que también está inscrita la responsable de asuntos educativos en la comunidad. «Los inscritos han votado por un consejo estatal plural en el que deben estar representadas las distintas sensibilidades de podemos, para eso vamos a trabajar», expresó sobre la situación interna.