El exviceconsejero de Obras Públicas del Gobierno de Aragón y exconsejero delegado de Plaza, Carlos Escó, y el exgerente de la plataforma logística, Ricardo García Becerril, fueron detenidos ayer por la mañana en sus domicilios de Zaragoza por la Brigada de Blanqueo de Capitales de la Policía, dentro de un nuevo caso en torno a la empresa pública por supuestas irregularidades en la compra de unos terrenos situados junto a la carretera N-II, a la altura del kartódromo. Fuentes próximas a la investigación señalaron que en dicha operación, en la que se pudieron producir movimientos opacos, se registró un desvío de dos millones de euros de dinero público.

Escó y Becerril fueron llevados a dependencias de la Jefatura Superior de Policía de Aragón, en Zaragoza, pero ambos se acogieron a su derecho a no declarar. Fueron puestos en libertad en torno a cinco horas más tarde, ambos con el cargo de malversación de caudales públicos por su supuesta implicación en hechos delictivos. El arresto de los exdirectivos de Plaza, que aparecen en otras causas, unas abiertas y otras sobreseídas, se realizó con conocimiento de la Fiscalía.

IRREGULARIDADES

La Brigada de Blanqueo de Capitales se decidió a actuar tras obtener unas declaraciones que al parecer revelaban la utilización de métodos supuestamente irregulares en las transacciones realizadas para la adquisición de unos terrenos situados actualmente junto al centro comercial Plaza Imperial y que al parecer debían formar parte de los accesos al macrocomplejo de las afueras de la capital aragonesa. Se trata del solar donde se hallaba un circuito de karts.

La Brigada de Blanqueo de Capitales llevaba un tiempo detrás de esta operación y todo indica que, en el curso de las pesquisas, se han obtenido declaraciones que apuntaban a que se habían registrado operaciones financieras irregulares.

Los detenidos, sin embargo, se negaron a declarar. "Ha sucedido algo muy grave", manifestó ayer Juan Monclús, abogado de Carlos Escó, que confirmó que su cliente, al que representa en otras causas, no había querido hablar a la Policía. "Es extrañísimo que se detenga a una persona con domicilio conocido y que está localizada", afirmó el letrado. En parecidos términos se expresaron Gimeno del Busto y José María Pabán, abogados de García Becerril.

Monclús manifestó que la Policía no le había permitido hablar antes con Carlos Escó y que tampoco había tenido acceso al atestado del asunto. "No sé ni de qué se le acusa en concreto, pero pienso que mi cliente no tiene nada que ver con los terrenos del kartódromo", aseguró.

Sin embargo, fuentes próximas a la investigación indicaron que, de los datos obrantes en las pesquisas realizadas hasta el momento, se deducen indicios que los pueden implicar en una nueva causa relacionada con la construcción y desarrollo del polígono de Plaza.

Este proyecto, lanzado durante el Gobierno socialista de Marcelino Iglesias, movilizó ingentes recursos públicos en la construcción de un polígono industrial y comercial junto a la autovía de Madrid. Sin embargo, con el tiempo se descubrió que en ocasiones se pudieron abonar grandes sumas de dinero por obras que no se llegaron a acometer o que en realidad tenían un coste muy inferior.

En la actualidad, las causas acumuladas, cuatro en total, llevan un ritmo diferente en los juzgados de Zaragoza. Unas se han estancado o sobreseído y otros siguen adelante y generan cada vez más papeleo y más imputados.