Unos 60 técnicos de estaciones de esquí de España, Andorra y Francia han visitado hoy Valdelinares (Teruel) para conocer la última tecnología en elaboración de nieve que la instalación turolense ha incorporado con su última ampliación.

Se trata de 52 cañones de nieve, de nombre TL6, que se han instalado en los 5,5 kilómetros de ampliación que la estación turolense ha estrenado esta temporada, ha informado Aramón, la empresa que gestiona el centro invernal.

Valdelinares es pionera en la instalación de esta tecnología en España con la que se obtiene un mayor rendimiento, ahorrando hasta un 44% de energía, y se reduce la potencia de consumo en la producción de aire.

Los cañones de nieve funcionan por una mezcla de agua y aire presurizados y expulsados a baja temperatura. Pueden arrancar con las condiciones adecuadas de humedad a -2ºC, aunque su rendimiento óptimo se produce con una temperatura de -4ºC.

La estación de esquí turolense ha estrenado esta temporada tres nuevas pistas y un remonte, lo que ha supuesto duplicar el dominio esquiable, además de la modernización del sistema de fabricación de nieve.

En las obras se han invertido ocho millones de euros, procedentes del Fondo de Inversiones de Teruel, (Fite) que financian a partes iguales del Gobierno de Aragón y el Gobierno central.

Una parte importante de la inversión se ha dedicado a la red de cañones para la fabricación de nieve artificial, fundamental para esta estación y la otra de la provincia, la de Javalambre.

Con los nuevos 52 cañones, la red de innivación suma 169 en total que aseguran la fabricación de nieve en todas las pistas de la estación. Para innivar, es necesario una gran cantidad de agua que se eleva desde Alcalá de la Selva.