La Policía Nacional arrestó recientemente a un zaragozano de 36 años, R. S. C., que había hecho del pequeño timo su forma de vida, estafando a comerciantes, principalmente del barrio del Actur, hasta lograr más .

Los agentes tuvieron noticia de sus prácticas el pasado mes de enero, cuando comenzaron a llegarles denuncias muy similares, con una descripción física coincidente, de varias tiendas del citado barrio zaragozano. El método que empleaba era una variante del poco elaborado timo del pariente, que consiste en hacerse pasar por un familiar lejano de alguien para pedirle una pequeña cantidad de dinero prestada.

En este caso, el joven entraba en tiendas y convencía a los empleados de que su madre era clienta habitual del establecimiento, y que tenía una urgencia porque le estaban llegando unos muebles a casa y tenía que abonarlos. Le fiaban cantidades de entre 190 y 400 euros en efectivo, tras comprometerse a que su madre lo devolvería en cuanto llegara a casa. Para apuntalar la historia, el hombre previamente averiguaba algún dato personal del dueño de la tienda, de forma que el empleado o encargado daba más credibilidad a su historia.

SALÓN DE JUEGO

Tras varias estafas en la zona, la Policía comenzó a investigar sus andanzas y le identificó y localizó en un salón de juego, donde estaba reinvirtiendo los beneficios. En su poder todavía encontraron 470 euros, mucho menos de los 3.150 que, según informó la Jefatura Superior de Policía de Aragón, había llegado a obtener.

El hombre fue puesto a disposición del juzgado de guardia de Zaragoza por un delito continuado de estafa.