El Colectivo de Estudiantes Progresistas de Aragón (CEPA) hizo ayer un llamamiento a la huelga general "contra el ataque a la educación" y afirmó tener "la necesidad imperiosa" de promover una "movilización general, unitaria y sostenida que consiga echar para atrás todas y cada una de las medidas que han provocado desde hace años una elitización y mercantilización cada vez más patentes en la educación".

Desde el colectivo estudiantil aseguraron estar ante "uno de los cursos más difíciles" para el sistema educativo aragonés, que, en el caso de los estudiantes, quedaría reflejado en aspectos como "la subida de tasas" --en terceras y cuartas matrículas y másteres-- o "el descenso de becas".

IMPERDONABLES Desde CEPA calificaron de "imperdonables" los ataques a la educación pública por parte de la "política educativa tanto del Gobierno de Aragón, personificada en la presidenta, Luisa Fernanda Rudi y la consejera de Educación, Dolores Serrat, como del gobierno de Mariano Rajoy", ya que, en su opinión, "atentan contra el pueblo, y especialmente contra aquellas personas que tienen menos recursos".

Asimismo, los estudiantes instaron al rectorado de la universidad a que se "oponga frontalmente y con todos sus medios a los recortes del Gobierno".

Asimismo, CEPA dio al bienvenida a los nuevos estudiantes matriculados este curso en la Universidad de Zaragoza y les animó a sumarse "a la lucha por la educación pública que debemos mantener mientras persista la actual situación de recortes que sufrimos".