Los investigadores Yamir Moreno y Carlos Martín han dado con la tecla. Estos expertos de la Universidad de Zaragoza han colaborado, junto a otros colegas, en la elaboración de un nuevo modelo de propagación de la tuberculosis que determina que, en las próximas décadas, la incidencia de la enfermedad podría aumentar.

El diseño epidemiológico es el más completo existente hasta la fecha incluye, por primera vez, los efectos reales del envejecimiento de la población y de los patrones de contacto en la dinámica de transmisión de la enfermedad. Dicho trabajo acaba de ser publicado recientemente en la prestigiosa revista Proceedings of the National Academy of Sciences USA (PNAS) y podría tener aplicaciones importantes para el diseño óptimo de campañas de vacunación y mejoras en el control.

Así, según el estudio, los casos a nivel mundial tenderían a aumentar si no se tienen en cuenta aspectos claves como el envejecimiento. «Este factor tiene un efecto inesperado en la modelación de la tuberculosis, pues su introducción en los modelos predice un ascenso en los niveles de incidencia de la enfermedad con respecto a los pronósticos producidos en poblaciones que no envejecen», explicaron ayer fuentes de la Universidad de Zaragoza.

Por otro lado, los investigadores incorporan en su formalismo datos recientes basados en encuestas sobre patrones de contacto entre grupos de edad, introduciendo por primera vez otras enfermedades respiratorias transmisibles como la gripe.

Los modelos con los que se contaba antes de este estudio «tenían limitaciones» a la hora de describir de manera precisa la relación entre demografía y transmisión de la tuberculosis. «Estos modelos que se usaban para pronosticar el nivel de incidencia operaban bajo el supuesto de estructuras demográficas estáticas», precisó el campus.

En Aragón / El estudio ha sido llevado a cabo por investigadores del Grupo de Redes y Sistemas Complejos del Instituto de Biocomputación y Física de Sistemas Complejos (BIFI), en colaboración con el Grupo de Genética de Micobacterias y el hospital Sainte Justine de Montreal.

Por su parte, la incidencia de la tuberculosis en Aragón se ha reducido a la mitad en los últimos veinte años y la tasa de 10,2 casos por 100.000 habitantes registrada el pasado año fue la más baja desde 1993.

Así se recogió en el informe publicado ayer por el boletín de Salud Pública con motivo de la celebración, el sábado, del Día Mundial de esta enfermedad. La tuberculosis es una de las 10 primeras causas de muerte en el mundo y, aunque la evolución pediátrica es decreciente, la cuarta parte de los casos se siguen dando en menores de 15 años.