El colectivo de Educadores en Lucha del Centro de Orientación y Acogida (COA) de Zaragoza exigió ayer al presidente de Aragón, Javier Lambán, una reacción "inmediata" sobre el conflicto que se viene sucediendo desde hace un año en el centro y que mantiene a los trabajadores en una situación de huelga.

"Pedimos humildemente que revisen el pliego que se ha otorgado a la empresa Intress, por un precio menor al mínimo exigido, y que tome cartas en el asunto", apuntó ayer Javier Itxaso, portavoz del colectivo junto a Elena López.

Los educadores, quienes estuvieron acompañados por Pablo Echenique, portavoz de Podemos en las Cortes de Aragón, y por Patricia Luquin, portavoz de IU, señalaron que la situación se ha convertido "en un conflicto político, heredado del PP" y que está repercutiendo "en la atención de los menores" y en las condiciones laborales de los trabajadores. "Estamos peor que hace un año. No se ha solventado nada y encima están pagando bajo coste el mínimo que se exige", añadieron.

Echenique señaló que "esto no es solo un conflicto laboral" y prometió que hará todo lo posible "para que esta injusticia tenga fin". Por su parte, Luquin apuntó que "nadie está por capricho" en huelga y recordó al Gobierno de Aragón que estos menores "son su máxima responsabilidad porque están bajo su tutela".

Fuentes del Departamento de Ciudadanía y Derechos Sociales precisaron ayer que el propio colectivo de educadores "fijó de común acuerdo" los servicios mínimos de trabajo en un 100% y que "en ningún caso" sus retribuciones han disminuido. Además, precisaron que se han celebrado cuatro reuniones con el comité de huelga para establecer un escenario de dialogo.