La primera Dolorosa que procesionó en Semana Santa por las calles de Zaragoza no tenía lágrimas y el Ecce Homo (el de Llovet) parecía que no había sufrido azote alguno. Era una época, la de inicios del siglo XIX en la que, a diferencia de otras provincias españolas, en la capital aragonesa se describía una Pasión de Cristo en la que el sentimiento estaba interiorizado. La sangre en las imágenes era la justa y el sollozo de una madre ante la pérdida de un hijo se representaba mediante gestos. El cambio vendría en 1949, cuando el granadino Manuel José Calero tallaba una Dolorosa (la que actualmente procesiona) llorando. Esta es una de las curiosidades que la exposición de la Hermandad de la Sangre de Cristo ha desvelado a los más de 16.000 visitantes que, desde el pasado 17 de diciembre, han ido a la Real Capilla de Santa Isabel de Portugal de Zaragoza.

La muestra que lleva por título Sanguis Christi Inebria Nos permanecerá abierta al público hasta el 21 de enero, de manera gratuita. En ella, esta hermandad realiza un recorrido histórico del Santo Entierro de Zaragoza que en el 2017 cumplió 400 años de su primera salida. Lo realiza a través de más de 200 piezas como el estandarte regalado por la Reina Isabel II a esta hermandad; imágenes titulares como la Piedad de Palao o con el boceto de Victoriano Balasanz de 1909 con el que se pretendía modificar por completo esta procesión. Las cuestiones económicas hicieron que el proyecto no se desarrollara y continuara la imagen actual.

semana santa // Los zaragozanos y turistas que ya han ido a ver la exposición, comisariada por Wifredo Rincón e Ignacio Navarro, también han podido conocer dos hechos históricos que se remontan a Los Sitios, cuando solo se pudo sacar intacto el Cristo de la Cama del derruido convento de San Francisco, actual edificio de la DPZ. O el incendio del almacén en el que se guardaban muchos pasos en 1935. También la bomba que explotó al paso del Santo Entierro o la huelga de terceroles que dejó atrás las andas (en Sevilla, el costal) con las que se representaba la Pasión de Cristo.

La muestra también sirve para conocer costumbres propias de la ciudad como la recogida de cadáveres de desamparados (que todavía sigue realizando esta hermandad) o para visitar una iglesia, la de Santa Isabel de Portugal (San Cayetano), perteneciente a la Diputación Provincial de Zaragoza (DPZ) y cuyas puertas no siempre están abiertas, a pesar de su valor histórico-artístico. En su interior se guardan los restos del Justicia de Aragón, Juan de Lanuza.

La exposición está abierta de lunes a jueves de 17.00 a 21.30 horas y los viernes, sábados y domingos de 10.00 a 14.00 horas por la mañana, y por la tarde en el mismo horario que entre semana.