El histórico dirigente socialista altoaragonés, diputado autonómico y exalcalde de Fraga, Francisco Beltrán, falleció ayer al mediodía a consecuencia de las complicaciones surgidas tras una delicada intervención quirúrgica. A pesar de su avanzada edad y su frágil estado de salud, la noticia de su muerte causó una gran consternación tanto en su localidad como entre muchos militantes socialistas y miembros de otros partidos, para quienes su figura fue siempre un ejemplo a seguir por sus virtudes éticas, su estricto sentido de la justicia social, su coherencia ideológica y su absoluto rechazo a hacer de la política un medio de vida.

Beltrán, de 84 años, fue además cofundador en el Alto Aragón del PSA, partido al que accedió desde sus principios socialistas de inspiración cristiana. Tras la escisión de la formación, Beltrán pasó a formar parte del PSOE, donde siempre ocupó puestos de relevancia en la ejecutiva provincial. Fue alcalde de Fraga con abrumadoras mayorías (fue uno de los primeros ediles más votados de España) desde 1979 hasta 1992, año en el que dimitió tras un episodio de tintes xenófobos que sacudió a la localidad y que no pudo soportar. Por aquel entonces ya se mostraba muy distante de la primera línea de la política y disconforme con el cariz que estaba tomando la dirección del PSOE.

Esa preocupación la tuvo hasta el final de sus días. Aunque apartado completamente desde ese año de la actividad pública, era asiduo a las reuniones de la agrupación socialista de Fraga donde siempre exponía sus ideas y sus puntos de vista, algunas veces críticos. También daba su opinión en los medios de comunicación y seguía con preocupación la crisis de los partidos, censurando y rechazando aquellas formas de actuar que supusieran un alejamiento de los principios que inspiran al socialismo. Durante las dos primeras legislaturas fue además diputado por el PSOE en las Cortes de Aragón.

Como primer alcalde de la democracia, su gestión fue determinante para la modernización de Fraga, y junto a su equipo de concejales, asentó las bases de los servicios sociales, dotó de infraestructuras y equipamientos culturales a la localidad y la situó como una de las ciudades más punteras y dinámicas de Aragón.

Durante su gestión se construyó el embalse de aprovisionamiento de agua, la construcción del polígono industrial fondo de Litera, la pasarela peatonal en el Casco Histórico, los muros de defensa del Cinca, el IES Bajo Cinca, la adquisición de la policlínica de Fraga, la recuperación del palacio Montcada, la zona deportiva y las pistas de atletismo de la Estacada o las piscinas municipales y el campo de fútbol del mismo nombre, entre otros.

Además, y tal como recuerdan los socialistas de Fraga en un comunicado, bajo su mandato se institucionalizó el 23 de abril como el día de la Faldeta, se remodeló la plaza de España y se construyó la plaza de Aragón. Defensor de las relaciones entre Aragón y Cataluña, Beltrán propició acuerdos en materia de sanidad y de educación, principalmente con la implantación del catalán en los centros educativos de Fraga y la comarca.

Tal como explicó ayer Miguel Luis Lapeña, secretario general del PSOE de Fraga, "desde su formación cristiana fue un político con principios sociales y humanos, referente en el socialismo de Fraga y de la provincia, que luchó desde muy joven y desde la clandestinidad, contra el régimen de la dictadura".