--¿Acudieron al concierto todas las chicas que aparecen en la portada del disco?

--Algunas, ya sabes cómo son las mujeres...

--Usted sabe mucho del asunto porque la mayoría de sus canciones las dedica a ellas...

--Sí, me he divorciado varias veces... No aprendo. Por eso escribo canciones.

--¿Es una nueva moda dar de merendar a los espectadores, como hizo en el concierto?

--Quisimos poner un cebo, y aún con todo a algún conocido lo eché de menos. Están las cosas muy jodidas. Es la frase de moda, y menos mal que nosotros nos lo pasamos bien sobre un escenario, pero hay mucha gente que lo está sufriendo con el paro y su trabajo...

--¿Qué pasó con aquel disco que grabó en directo en La Campana?

--Un proyecto que murió antes de nacer. Quedó demasiado friky y ninguno de los tres estábamos a gusto con ese resultado. Estamos reciclando el espectáculo.

--¿Intuye por donde van a ir los tiros musicales en esta época de crisis emocional y económica?

--Sí: no tengo ni puta idea. Pero me gustaría que la música se escuchara en pequeños locales, con proximidad, donde se juntaran artistas consagrados con otros menos conocidos...

--¿Qué es Luces, cámara, acción?

--Mi nueva producción, del grupo Vinos Chueca. Un paso adelante en nuestra forma de entender la música.

--¿Sigue bebiendo de las mismas fuentes musicales o está descubriendo nuevas fórmulas?

--De momento, he dejado de beber. En cuanto a las influencias, ahora estoy escuchando un poquito tarde Weather Report, con Jaco Pastorius, y Tom Waits. Más vale tarde que nunca. El blues con cierto toque de cabaret que hace Tom Waits me parece muy interesante. Esa época era auténtica.

--¿Se considera bien pagado, comprendido?

--No, no. Si nosotros tuviéramos la posibilidad de entrar en los circuitos comerciales, de gozar de un poco más de promoción, estoy seguro de que nos conocería más gente, porque los que nos conocen ya nos comprenden. Y vemos que nuestra música puede gustar. Pero el concepto que se maneja en el mundo del espectáculo es el de consumir solo aquello que ya conocemos

--Estoy seguro...

--Porque además hay salas que ya poseen un público capaz de ir aunque no conozcan al artista. Lo que hace falta es que nos inviten.

--¿Está ilusionado?

--Sí, aunque parezca un tópico, si no tuviera la misma ilusión del primer día ¡habría mandado todo a tomar por...!

--Déjelo. Le entiendo.