La campaña de prevención de incendios forestales del Departamento de Desarrollo Rural y Sostenibilidad en la que han participado 1.500 escolares finalizó ayer. A través de 70 actividades distintas, Ayúdanos, el fuego no perdona, se ha enmarcado en dos ámbitos.

Por un lado, en zonas urbanas, con el objetivo de poner en práctica los usos y hábitos que han de tener en cuenta los escolares y sus familias para evitar los incendios forestales cuando van al campo a realizar actividades de ocio. Por otra parte, en el medio rural y sobre todo en áreas donde históricamente se ha producido mayor número de incendios, se ha transmitido a los escolares la importancia de compatibilizar el uso del fuego con la conservación del medio o aplicar alternativas al uso del mismo. Asimismo, se intenta que compartan estos conocimientos con los adultos, para sensibilización y concienciación en las prácticas agrícolas y ganaderas.

En el acto se entregaron los premios a las 3 mejores fotografías del concurso en el que participaron 35 aficionados con 100 instantáneas.