El ministro de Fomento, Íñigo de la Serna ha valorado hoy el ritmo de las obras de ejecución de tres complejos tramos de la autovía A-23, entre Huesca y el Pirineo, y ha expresado su confianza en que se puedan cumplir con los plazos inicialmente previstos.

De la Serna ha hecho estas manifestaciones durante una visita a hecha a los puntos en obras de la A-23 en la que ha anunciado la entrada en servicio, el próximo mes de junio, de tres kilómetros del tramo entre Caldearenas y Lanave en el que se ubica un viaducto de 350 metros que salvará el espacio protegido de La Guarguera.

Un mes de junio, ha añadido el ministro, en el que también se prevé el inicio de las obras de un viaducto de 70 metros en el puerto de Monrepós, la solución finalmente aconsejada por los técnicos tras el deslizamiento de ladera que produjo el hundimiento de un tramo de la N-330.

Ha adelantado, además, que también en junio se iniciarán las obras, en la autovía A-22, del tramo Huesca-Siétamo, un proyecto bloqueado desde años atrás por dificultades medioambientales que permitirá enlazar este eje viario con la A-23.

En total, ha resaltado, el Ministerio de Fomento tiene en marcha en la región obras de infraestructura por unos 700 millones de euros, lo que, a su juicio, convierte a Aragón en una de las comunidades en las que "mayor inversión se está haciendo".

En el eje de la A-23 están en marcha el tramo congosto del Isuela Arguis, con una inversión de 65 millones y un plazo previsto para su entrada en servicio fijado en marzo de 2019; y el que discurre entre el alto de Monrepós y Caldearenas, presupuestado en 122,8 al haber sido necesario construir un túnel de 4 kilómetros.

De la Serna ha destacado que el tramo más avanzado en su ejecución es el que discurre entre Caldearenas y Lanave, con una inversión de 104 millones y que entrará en servicio parcialmente el punto donde se ubica el viaducto sobre el río Guarga.

La multitud de obras que se llevan a cabo simultáneamente en la A-23 ha llevado a los técnicos de Fomento a encargar un estudio geológico completo de todo el corredor del Monrepós a un especialista de la Universidad de Cantabria, César Saragaseta.

El ministro, que tiene previsto inaugurar posteriormente el inicio de las obras del tramo de la A-21 entre Tiermas y Sigüés, en Zaragoza, ha enumerado posteriormente los distintos compromisos de su departamento en Aragón, entre ellos el comienzo, este año, de la adecuación del tramo de la N-260 en el Congosto de Ventamillo.

También ha anunciado la ejecución de obras o su avance en la A-68 en Figueruelas (54 millones) y entre Gallur y Mallén (56), en la N-232, de Ráfales a la provincia de Castellón; en el tramo de la A-15 a su paso por Zaragoza y en la A-40, de Rincón de Ademuz a Teruel.

El responsable político se ha referido, asimismo, a las inversiones iniciadas o previstas en infraestructura ferroviaria en Aragón, con un presupuesto estimado de 370 millones de euros hasta el año 2021.

Entre estas obras, ha destacado el compromiso del Gobierno con la conexión Sagunto-Teruel-Zaragoza, que ha permitido incrementar el tráfico diario de tres a diecisiete trenes.

Ha añadido en relación a esta conexión que en breve se comenzarán unos trabajos que se prolongarán por 6 meses para aumentar la capacidad de esta estructura con el fin de aumentar la capacidad de transporte de mercancías en el eje.

Se ha referido, asimismo, al acuerdo alcanzado con el Adif (Administrador de Infraestructuras Ferroviarias) para la renovación y adecuación de la playa de vías de la estación de Canfranc, así como a los 70 millones previstos para la mejora de esta línea y a los acuerdos con Francia para la reapertura del tráfico internacional.

Ha anunciado, asimismo, el inminente acuerdo que suscribirá su departamento con Renfe para asumir la financiación de la conexión ferroviaria Madrid-Arcos-Zaragoza, con destino y origen en Calatayud y Miraflores, que hasta ahora financiaba el Gobierno de Aragón.

En su comparecencia, De la Serna ha expresado su satisfacción ante el crecimiento del tráfico de mercancías en el aeropuerto de Zaragoza en los cuatro primeros meses del año, un 40 por ciento más que sitúa esta infraestructura aeroportuaria sólo por debajo de Barajas-Adolfo Suárez en Madrid, y por encima del de El Prat en Barcelona.