El subprefecto de Oloron Sainte Marie, Samuel Bouju, aseguró ayer en Huesca que Francia ha intensificado el ritmo de los trabajos en la carretera RN134 con el fin de subsanar cuanto antes los problemas de estabilidad de las laderas que desde principios de mes impiden el paso de vehículos de más de 3,5 toneladas.

Bouju hizo este anuncio ante el delegado del Gobierno en Aragón, Gustavo Alcalde, y la subdelegada en la provincia oscense, María Teresa Lacruz, en el curso de una reunión de trabajo para analizar la situación actual de la vía que comunica Aragón con Aquitania. El subprefecto explicó las "importantes fisuras detectadas en la zona", así como su interés en solucionar el problema "lo antes posible".

Francia prohibió el pasado día 8 de abril la circulación de los vehículos de más de 3,5 toneladas debido a las obras de reconocimiento geotécnico y de reparación de un muro de sujeción, entre los puntos kilométricos 111,040 y 111,080.

En la reunión se analizaron los resultados de los informes del estado de la vía, que han mostrado un grave deterioro de la solidez del terreno y un riesgo de hundimiento de la calzada.

Bouju señaló que se han duplicado los equipos de las empresas que realizan los trabajos de consolidación para reducir la duración de las obras "respetando las normas de seguridad en una vertiente que es particularmente abrupta".