La Comisión Sectorial de Estudiantes del Grupo 9 de Universidades ha propuesto hoy que la nueva prueba de acceso -Evaluación de Bachillerato para Acceso a la Universidad (EBAU)- "siga siendo similar a la anterior Prueba de Acceso a la Universidad (PAU) y consiga mejorar alguno de sus aspectos".
Esta es una de las conclusiones de la reunión celebrada hoy en la Universidad de La Rioja (UR) por esta Comisión Sectorial del G-9, formada por las nueve universidades que son únicas universidades públicas en sus respectivas comunidades autónomas.
En una nota, esta Comisión Sectorial ha estimado que se debe dar "estabilidad" al sistema, por lo que pide que sea similar la prueba de acceso a la universidad, aunque cree que "continuará teniendo el grave defecto de estar basada en un modelo de Bachillerato fijado por la LOMCE, que no cuenta con el deseable consenso de la comunidad educativa".
Los responsables de los Vicerrectorados de Estudiantes de las nueve universidades del Grupo han analizado, además, cómo se ha desarrollado la última prueba de acceso a la universidad y han estudiado propuestas de mejora para las pruebas que se llevarán a cabo en la primavera de 2018.
Han indicado que el G-9 de Universidades se congratula de que el planteamiento que surgió de la reunión de esta misma Sectorial hace un año se reflejase en gran medida en la prueba finalmente implantada en las diferentes comunidades autónomas.
Pese a ello, han considerado que en la última prueba se produjeron ciertas "disfunciones" que deberían ser evitadas y entienden que el Ministerio de Educación debería actuar con agilidad para que todos los institutos y centros que imparten Bachillerato conozcan los criterios con los que preparar a sus alumnos con la suficiente antelación.
El G-9 de Universidades ha instado a que desaparezca la "anómala" situación que permitía el acceso a la universidad sin prueba de acceso para aquellos alumnos con el título de Bachillerato; y ha abogado por establecer medidas para minimizar el número de estudiantes "agraviados" por haber cursado un Bachillerato diferente del que se tienen que examinar para acceder a la universidad.
Junto a ello, estas nueve universidades consideran que el Ministerio debería ser receptivo a la petición de que se flexibilice el tratamiento de los idiomas, de manera que los alumnos puedan elegir como lengua extranjera cualquiera de las ofertadas en segundo curso de Bachillerato.
El G-9 de Universidades, asociación creada hace veinte años, está formada por las Universidades de Cantabria, Castilla-La Mancha, Extremadura, La Rioja, Oviedo, País Vasco, Pública de Navarra, Zaragoza e Islas Baleares.
