Fueron los más aplaudidos por la labor que realizan con las personas que padecen parálisis cerebral. La Asociación Aspace, de la mano de la directora de su fundación Consuelo Ciria, recibió ayer el galardón dedicado al trabajo social que entrega la Asociación de Exconcejales Democráticos, un preciado trofeo que Ciria no dudó en dedicar al trabajo. En general y en particular. "Debe ser una inyección de ánimo para el personal, que es que lo merece", apuntó, ante un aforo repleto de ilustres de la política municipal y que encabezaba el presidente de la asociación Luis García Nieto.

No desperdició la oportunidad García Nieto de recordar los graves problemas de financiación de los municipios. Ni de lanzar un mensaje al vicealcalde Fernando Gimeno, que había recordado que los presupuestos están al caer: "Ayudar a los colectivos y a las entidades es también ayudar a la ciudad". El capítulo reivindicativo ya lo había inaugurado Marina Fortuño, periodista de la Ser que condujo el acto, y que comenzó con un mensaje de ánimo. "Con la que está cayendo cada día tenemos que inventar algo para que la esperanza no se pierda", dijo.

Los que se sí fueron con esperanzas renovadas fueron el arzobispo Manuel Ureña, que recogió el galardón en cultura por el Museo Diocesano, y el gerente de Zaragoza Vivienda, Nardo Torguet, que se llevó el de urbanismo por la actuación en Las Armas.