El Gobierno de Aragón ya está trabajando en un proyecto de ley (a través de los departamentos de Presidencia y de Educación, Cultura y Deporte) en el que se recojan algunas de las reclamaciones establecidas por las asociaciones memorialistas de la comunidad.

El Ejecutivo admite que el documento todavía se encuentra "en un punto muy primigenio", aunque se han mantenido diversas reuniones y se está estudiando la legislación en la materia de otras comunidades autónomas. La DGA explica que cuando se apruebe la ley se podrá regular un asunto "prioritario" para convertirlo en "algo habitual, demostrando el respeto que merece".

Más concretas son las ayudas para impulsar proyectos de investigación y difusión, realizados por particulares, entidades sin ánimo de lucro y empresas dirigidas a la recuperación de la memoria de la lucha por la democracia en Aragón, que se espera que aparezca en el BOA en las próximas semanas.

En Belchite se ha creado también Mesa de Trabajo integrada por diversas instituciones que elaborará un plan de consolidación del pueblo viejo. De momento, en los presupuestos hay consignada una partida de 40.000 euros destinados a tal fin.

Con un componente más simbólico la DGA también está trabajando en una especie de "geografía de la memoria en Aragón", todavía sin detalles concretos sobre su ambiciones o sedes, que pretende ser "uno de los grandes proyectos de la legislatura en esta materia", según indican desde el departamento de Presidencia.

En materia educativa, dentro de la asignatura de Historia, los escolares aragoneses de ESO y Bachillerato tendrán especial énfasis en todo lo ocurrido desde la Segunda República hasta la Transición.

Los plazos para esta modificación tampoco se han precisado, aunque los alumnos de cuarto de la ESO y los de segundo de Bachillerato ya tendrán el curso que viene contenidos destinados a obtener una actitud responsable y solidaria con la defensa de la libertad, los derechos humanos, los valores democráticos y la memoria democrática.