La recepción del barracón por parte de los vecinos de Valdespartera podría no producirse en cuanto se terminen las obras, las cuales están a punto de finalizar. La Asociación de Vecinos Montes de Valdespartera y algunos miembros de la Federación de Asociaciones de Barrios (FABZ) decidieron el pasado miércoles pedir una reunión al Ayuntamiento de Zaragoza para solicitar una propuesta de gestión del edificio ya que ellos, en principio, no estarían dispuestos a asumirla en su totalidad porque "económicamente no pueden hacerse cargo" de los gastos del que está previsto sea el hotel de asociaciones de los barrios del sur.

Urbanismo ya contaba con que el equipamiento se destinase a ser la sede de las asociaciones de los nuevos barrios de la ciudad, entre ellos Rosales del Canal, Valdespartera y Montecanal; pero ahora los vecinos parecen tener dudas.

El edificio se salvó de la demolición porque la sociedad Los Tranvías pagó un alquiler mensual al consistorio para que fuese el lugar donde se instalasen sus oficinas. Cuando esta dejó de operar allí, los vecinos del distrito insistieron en que no se derribase el barracón y lo consiguieron. Un empecinamiento que ahora parece haberse diluido ya que temen hacerse cargo en solitario de los gastos.

Según fuentes municipales, un pacto no escrito entre las asociaciones y el ayuntamiento fue lo que desencadenó esta cesión: a cambio de las obras y la entrega gratuita del espacio, ellos debían hacerse cargo de los gastos esenciales del barracón: agua, luz, personal, etc. Desde la entidad vecinal coinciden en que el ayuntamiento les planteó que los pagos corriesen por su cuenta, y según los cálculos que han realizado al 50% de lo que pagaban Los Tranvías, el dispendio ascendería mínimo a 1.000 euros al mes. Una cifra que "no pueden asumir como asociación en solitario" ya que la subvención que reciben del consistorio es de 300 euros y al año ingresan por cuotas de asociados 3.000 euros.

Y aunque en el 2013 se mostraban a favor de la autogestión, esta preocupación llevaría a los vecinos de Valdespartera a negarse a recepcionar el barracón a no ser que la gestión fuese compartida con el resto de barrios, opción que en ningún momento se ha desestimado por parte del ayuntamiento y que fue la que se acordó.

La recepción del edificio se materializaría en un convenio entre el consistorio y las asociaciones de los barrios que lo gestionen, como se ha hecho con las últimas cesiones de espacios públicos en la ciudad. En Valdespartera estarían dispuestos a buscar personal para el día a día del edificio, siempre y cuando fuese más de un colectivo los que allí se juntasen.