El Gobierno de Aragón creará un oficina técnica de Política Lingüística. Se encargará de la gestión de todas las cuestiones administrativas referentes al desarrollo de la Ley de Lenguas, que ayer mismo se publicó en el Boletín Oficial de Estado. Este órgano contará con una plantilla de unas seis personas, que ya se encuentran desempañando diversas funciones en la estructura de la DGA. Por ello no será necesario realizar ninguna modificación presupuestaria para su puesta en funcionamiento.

La oficina se encargará de canalizar las cuestiones más urgentes que acarrea la Ley de Lenguas. Por ejemplo su aplicación en el ámbito educativo a partir del próximo curso. Además, también mantendrán contactos constantes con las diferentes asociaciones del territorio cuyo objetivo es la promoción y protección de las modalidades propias y cuya actividad se intentará impulsar. Aunque se verdadera función será articular las primeras acciones de la ley en el territorio.

Así, desde la oficina de Política Lingüística, que se ubicará en el organigrama del Departamento de Educación y Cultura del Gobierno de Aragón, se activarán una serie de medidas para el fomento del uso de las variedades. Así, habrá ayudas y subvenciones para promover la existencia de premios literarios en las lenguas propias. Además, está previsto que se fomente, a través de convenios, la edición de libros en aragonés y catalán, así como textos escolares para la enseñanza en las escuelas.