El presidente de la Diputación de Huesca (DPH), Miguel Gracia, ha asegurado hoy que las fronteras administrativas "no dan respuesta" a las necesidades demandadas por los vecinos de zonas limítrofes entre Aragón y Cataluña.

Gracia ha hecho esta afirmación con motivo de la inauguración de un puente construido en el municipio de Alcampell sobre uno de los desagües del Canal de Aragón y Cataluña que evitará a los vecinos de la zona largos desplazamientos de hasta dos kilómetros para acceder a sus campos.

El responsable institucional ha defendido el "ejercicio del municipalismo" como una herramienta con la que "limar" y resolver conflictos tanto dentro de una misma población como en marco de convivencia con otros municipios, informa la DPH.

Ha señalado que en el caso de poblaciones situadas en zonas limítrofes con Lérida, las fronteras son más de carácter administrativo y "ajenas" a la realidad de los vecinos de ambas zonas.

"Desde la distancia no se aprecia o no se tiene en cuenta en muchas ocasiones a las personas que viven en estas zonas", ha señalado Gracias, quien ha subrayado la "normalidad del día a día" de los vecinos de estas zonas, basada en una convivencia de culturas, tradiciones y "hasta de lazos familiares".

El presidente de la DPH ha puesto en valor la labor de los ayuntamientos como administración más "apegada" al territorio y las necesidades demandadas por los vecinos, sin duplicidades de competencias ya que, según ha explicado, la Institución provincial son proyectos que otras administraciones no alcanzan a realizar.

Ha añadido que gracias al puente construido sobre el desagüe de Alcampell, cuyo coste ha ascendido a 90.000 euros, las provincias de Lérida y Huesca no sólo estarán "mejor conectadas" sino que sus vecinos se beneficiarán de un "ahorro" de tiempo en sus desplazamientos cotidianos.