La Guardia Civil ha detenido a un joven de 27 años, A. T., por un delito contra la salud pública, al transportar 1,8 toneladas de pescado en malas condiciones higiénicas y sin control sanitario desde Extremadura a su Rumanía natal. El conductor fue interceptado en la autovía A-2, tras parar en el arcén a la altura de El Frasno.

Según explicaron fuentes del instituto armado, a la patrulla de la localidad le llamó la atención la furgoneta aparcada fuera de la vía, el pasado miércoles. Se acercaron pensando que se trataba de una avería, pero observaron que el vehículo presentaba un claro sobrepeso.

Ante esto, pidieron al joven conductor revisar la carga, y comprobaron que había un gran número de carpas, aparentemente en malas condiciones de conservación. De inmediato llamaron al Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) del instituto armado, para que comprobasen que el transporte se realizaba correctamente.

La documentación que aportó el conductor a los agentes, además de que no estaba en castellano, carecía de muchos datos básicos, como el origen y la trazabilidad del producto, además de la fecha de captura. Ante estas irregularidades, dieron aviso a un inspector del departamento de Sanidad del Gobierno de Aragón. Este acreditó la falta de documentación necesaria y decidió la paralización temporal de la carga, dando unas horas de plazo al transportista para que completase los datos de la mercancía.

La información nunca llegó a ser aportada, por lo que el jueves por la mañana, la inspección de la Zona Veterinaria de La Almunia levantó acta para certificar que los 1.880 kilos de pescado constituían un riesgo para la salud pública y no eran aptos para el consumo humano. Las carpas fueron trasladadas a un centro de tratamiento para ser destruidas, lo que fue ejecutado el mismo jueves.

ARRESTO

Una vez completados estos trámites, los agentes del Seprona procedieron a detener al conductor, por la presunta comisión de un delito contra la salud pública. Fue puesto a disposición del Juzgado de Instrucción número 1 de La Almunia, con las diligencias practicadas. El instituto armado no indicó en qué situación procesal quedó el joven arrestado tras su comparecencia ante el juez instructor.

Según pudieron determinar los investigadores, las carpas habían sido pescadas en algún lugar de Extremadura, y la ruta de transporte incluía una parada en Italia, antes de alcanzar el destino final, Rumanía, de donde es originario el conductor y donde pretencía vender el pescado obtenido.

Además de estas gestiones penales, los agentes del Seprona dieron cuenta de los hechos al Departamento de Sanidad del Gobierno de Aragón y al Servicio Provincial de Desarrollo Rural y Sostenibilidad, por si además del delito que le imputan el conductor pudiese haber cometido alguna infracción administrativa, bien por la falta de la pertintente documentación o bien por el transporte internacional.