La Guardia Civil rescató ilesos a primeras horas de la mañana de ayer a dos montañeros que se habían quedado enriscados en la arista de los Murciélagos, en el pico de Aspe, la tarde anterior. El mal tiempo impidió a los especialistas de la Benemérita llegar hasta los escaladores a lo largo de la noche.

La voz de alerta fue dada sobre las 20.10 horas del martes a través de una llamada telefónica al número de emergencias del cuerpo. Los agentes se desplazaron a la zona y pidieron ayuda al personal de la estación de esquí de Candanchú, que facilitó su transporte hasta el punto más cercano al pico en una máquina pisanieves.

Con temperaturas bajo cero, los agentes ascendieron a pie por la nieve y el hielo hasta la cima del pico, superando un desnivel de unos 700 metros, y comenzaron a desplazarse por la arista de los Murciélagos para llegar, a través de zonas heladas muy expuestas, hasta los dos montañeros.

Tras un intento de acceder a la zona por una complicada canal, los especialistas pudieron comunicarse a las 3.00 horas con los montañeros, que les informaron de que se encontraban bien.

Se trata de un vecino de Berriozar (Navarra) de 33 años y otro de Vergara (Guipúzcoa) de 35.