El vecino de Ricla al que buscaban los bomberos de la Diputación de Zaragoza y la Guardia Civil ha aparecido sano y salvo en una nave situada a unos siete kilómetros del casco urbano de la localidad.

Ha sido uno de los hijos de esta persona el que, al saber dónde había sido visto por última vez, ha pensado que su padre podía estar en el lugar en el que finalmente ha sido localizado.