La Guardia Civil recuperó ayer restos óseos y efectos que podrían pertenecer a un montañero que desapareció el 23 de abril de 2011 cuando descendía de la Peña Montañesa, cerca del municipio de Laspuña, en el Sobrarbe. Los huesos fueron encontrados el sábado por un cazador en la cara norte de la montaña, en una ladera muy abrupta y con fuerte inclinación cubierta por un espeso pinar.

Los efectivos del Grupo de Montaña de la Guardia Civil desplazados al lugar hallaron además en las inmediaciones más restos óseos correspondientes a un cuerpo humano, así como una mochila, ropa y enseres personales. Entre los objetos se encontraba la documentación correspondiente a R. S. Y, vecino de San Juan de Mozarrifar (Zaragoza), desaparecido desde el día 23 de abril de 2011, cuando llamó por el móvil a su mujer para decirle que había niebla y que se había perdido.

A partir del suceso, efectivos de la Guardia Civil y de la Unidad Militar de Emergencias, así como grupos de montañeros y vecinos, peinaron Peña Montañesa en busca del excursionista, pero el rastreo resultó infructuoso y, al cabo de 52 días, se abandonaron las batidas. Al dispositivo de búsqueda se sumaron además familiares y amigos de la víctima.

Debido a la hora en que se hallaron los restos, casi al atardecer, y a la dificultad para llegar a la zona, se acordó con el juez de Boltaña posponer el levantamiento del cadáver hasta ayer, cuando se recogieron todos los huesos y se trasladaron a Barbastro para su reconocimiento por el forense y para ser sometidos a análisis de ADN.

TERRENO ACCIDENTADO

La Guardia Civil recordó ayer la dificultad con que se realizaron estas labores de búsqueda, debido a las condiciones del terreno.

En este sentido, es posible que la víctima se perdiera por culpa de la niebla cuando regresaba al monasterio de San Victorián, donde había quedado que lo pasaría a recoger un familiar. Todo indica que se pudo equivocar de pista, lo que explica que sus restos hayan aparecido en la cara norte, cuando los senderos más practicables y transitados que ascienden a la cumbre Peña Montañesa (2.291 metros) se hallan en la vertiente sur.

La Policía Judicial de la Guardia Civil ha instruido diligencias que serán remitidas al Juzgado de Boltaña, junto con los efectos recuperados.

La Benemérita recordó ayer la necesidad de seguir una serie de normas elementales de seguridad en las excursiones al monte. Para empezar, no se debe ir nunca solo. Además, hay que informarse del tiempo que hará e ir correctamente equipado.

Se debe dedicar todo el tiempo necesario a planificar la actividad y no realizarla en el caso de comprobar que no se tiene la forma física requerida para el esfuerzo ni equipamiento adecuado. Asimismo, antes de salir conviene informa en casa o en el lugar donde nos hallamos alojados del lugar al que nos dirigimos. Por último, es preciso llevar el teléfono móvil cargado y avisar de cualquier contingencia al 062 de la Guardia Civil.