Debe ser que como Franco murió en su cama (eso sí, tras horrible agonía sádicamente prolongada por su propio entorno), pues parece que España no acaba de integrarse en el pensamiento de la Europa occidental respecto del nazi-fascismo y sus derivados. Quiere decirse que en Alemania ni existe ni puede existir un topónimo cualquiera seguido del remoquete del Führer, pero en nuestra amada patria sí cabe toparse de repente con Llanos del Caudillo o similares. De ahí que vengamos arrastrando ese miserable debate sobre la dictadura y la memoria de sus numerosas víctimas. Si por algunos fuera, hasta los libros de historia serían convenientemente expurgados de cualquier referencia a lo que nos sucedió entre el 36 y el 75. Los asesinados, por supuesto, en las fosas comunes. Que no vengan a enredar.

Otro aspecto de la cuestión es la contraposición sistemática entre los muertos de los unos y los de los otros. Absurdo equilibrio que los países de nuestro entorno también zanjaron radicalmente. Sí, cierto, los aliados destruyeron ciudades alemanas con bombardeos intensivos, el Ejército Rojo avanzó desde Prusia Oriental violando y saqueando sin piedad, las tropas anglobritánicas asaltaron Normandía sin preocuparse de hacer prisioneros. Pero eso no ha sacado a Hitler del vertedero de la historia ni nadie sensato utilizaría tales hechos para justificar el caracter genocida de su bestial régimen. La europa democrática celebra en cada efemérides su victoria sobre el fascismo, la negación del Holocausto es delito, los campos de extermino son hoy museos contra el olvido... y punto.

España es diferente. Aragón, la más famosa. En esta tierra que tanto padeció la Guerra Civil y su interminable postguerra, sería imprescindible usar la memoria para construir un presente libre de tabúes y de miedos, para limpiar las zonas más sombrías de nuestro subconsciente colectivo y para hacer justicia. Así de simple.

Y ya disculparán si hoy no hablo de expos ni de recalificaciones de suelo ni de crisis ni de politiqueos... ni de GS. Algunos de estos temas ya empiezan a darme yuyu.