Hasta el 50% de los hombres aragoneses mayores de 50 años y el 80% de los que superan los 80 sufren la denominada hiperplasia benigna de próstata (HBP), un aumento de tamaño de esta glándula que rodea la uretra que ocasiona a los varones serias dificultades para orinar.

Pese a que no se trata de un proceso cancerígeno, los que la sufren se exponen a sufrir importantes síntomas urinarios y renales, que pueden llegar a mermar sustancialmente su calidad de vida. Según las estimaciones de la Asociación Española de Urología (AEU), realizadas con motivo de la conmemoración, hoy lunes, del Día Europeo de la Salud Prostática, unos 135.261 aragoneses sufren esta enfermedad, que afecta a 105.349 mayores de 50 años y a 29.912 varones mayores de 80.

Existen numerosas soluciones para tratar la HBP, por lo que se impone acudir a la consulta del urólogo. Dependiendo del grado de gravedad, los expertos aconsejarán tratamientos farmacológicos o quirúrgicos. En el caso de la cirugía, el láser verde es el procedimiento más utilizado a nivel mundial. "El tratamiento de la hiperplasia benigna de próstata con el láser verde ha sido, junto a la litotricia por ondas de choque y la cirugía laparoscopica, la aportación más importante en el desarrollo de la Urología de los últimos decenios. Es un tratamiento realmente revolucionario", afirmó el doctor Carlos Rioja, jefe del servicio de Urología del hospital Royo Villanova.

Esta intervención ambulatoria resulta adecuada para la mayor parte de los pacientes que sufren HBP.