Lejos de mejorar la situación, cada vez parece más insostenible. Y no solo para los conductores de autobuses, sino para los propios usuarios. Cada vez hay más casos de enfrentamientos y discusiones dentro del autobús y en las distintas paradas. "He llegado a presenciar fuertes discusiones entre conductor y viajeros. Al comienzo de la huelga no pasaba esto, pero cada vez sucede más a menudo", contó Pura, una zaragozana que utiliza mucho este transporte público. Otro cliente habitual, Luis Zaragoza, contó que también había visto broncas dentro del autobús: "Es una vergüenza, y parece que nada va a cambiar". Debido a los retrasos, a la falta de servicio, y a la interrupción de algunos recorridos donde se obliga a los usuarios a bajar del vehículo, la crispación cada vez es más evidente entre los viajeros, que han comenzado a quejarse en persona. En ocasiones se dirigen a la Oficina de reclamaciones, pero otras deciden hacerlo en el propio autobús.
Entre los usuarios, se destaca la situación de las personas inválidas y los trabajadores. Las primeras, por tener poco margen de movilidad y verse obligados a esperar largos periodos de tiempo, sin poder hacer el recorrido a pie. El segundo grupo, por los problemas a la hora de llegar puntual a su trabajo, ya que nunca saben con exactitud a qué hora va a llegar el transporte público a su parada.
Los servicios mínimos son muy criticados por los viajeros, ymuchos de ellos consideran que los conductores no están siguiendo el horario establecido. "Creo que no se cumplen los mínimos porque muchas mañanas que voy a trabajar (antes de que empiece la hora de huelga), ya hay retrasos y problemas", contó, Emma, una usuaria. "Deberían bajar el precio del billete", sostuvo Pilar, otra viajera, que aseguró que le afecta en gran medida la huelga por su problema para andar. Por todo ello, la Unión de Consumidores ha instado a los usuarios de bonos temporales a exigir una devolución o una compensación, por "la falta de prestación del servicio contratado".
Rosa: «Los usuarios no tenemos la culpa»
«La verdad es que todavía no tengo claro lo que piden, ni por qué, pero me parece que se están pasando. El otro día esperé más de media hora, y esto ya es lo habitual, lo de todos los días. Y ahora con la llegada del mal tiempo incluso es peor tener que esperar tanto rato. No puedo entender que la huelga nos esté afectando a todos los usuarios, porque nosotros no tenemos culpa de nada. Y menos los jubilados. Deberían ponerse de acuerdo cuanto antes».
Josefa: «La situación cada vez es peor»
«Creo que no podemos seguir así. Me parece muy mal que lo paguemos siempre los mismos. Hay días que tengo que volver andando porque no se puede esperar tanto tiempo, y en invierno es muy incómodo, con el frío que hace, estar esperando en la parada del autobús. Para los jubilados que cogemos siempre el transporte público es muy complicada esta situación, y cada vez es peor. Mi opinión es que si quieren protestar, que protesten, pero no a costa de los demás».
Luis: «He visto broncas en varios autobuses»
«Es una vergüenza cómo está funcionando ahora el servicio. He tenido que esperar muchos minutos por los retrasos, y a veces van con tanta prisa que ni los vemos y pasan de largo. Siempre cojo el mismo autobús y no hay ni un día que no ocurra algo negativo. Además, he presenciado broncas y discusiones dentro de varios autobuses entre conductor y usuarios, y no me ha gustado nada. Cada vez se nota más el cabreo de todos, no sé en qué va a acabar».
Jorge: «He llegado a esperar una hora»
«Soy estudiante y cojo el autobús casi a diario, pero últimamente me he visto obligado a ir a más sitios andando porque no son normales estos retrasos. Esta situación ya empieza a cansar. He llegado a esperar incluso una hora al autobús, y siempre las paradas están llenas de gente, a las que a veces dejan sin subir y tienen que esperar mucho rato más. Deberían sentarse conductores y la empresa a dialogar, y acabar con el problema ya mismo».
María del Carmen: «Esta situación no es normal en Zaragoza»
«Esta situación no es normal para una ciudad como Zaragoza. Es el principal transporte y no puede funcionar así de mal. Lo uso a diario y me espanta que vayan con tanta prisa, para la gente mayor es difícil tanto agarrarse como bajarse del autobús a veces, porque no tienen en cuenta que tardamos en hacerlo y arrancan sin fijarse. Y luego están los retrasos, que hacen que estemos decenas de personas en la parada esperando. Esto es inaguantable y tienen que arreglarlo ya».
Carmen: «Hay trabajadores que están peor»
«Entiendo que luchen por sus derechos pero no molestando a los demás. Sé que están buscando un aumento de sueldo que les prometieron, pero deberían saber que algunos tenemos unos sueldos más bajos que ellos y no molestamos a nadie con nuestras reclamaciones. Creo que ya tienen el sueldo necesario para trabajar de una manera eficiente y que tendrían que estar contentos. Hay trabajadores que están mucho peor, y que tienen el sueldo congelado desde hace años».
Pilar: «Deberían bajar el precio del billete»
«Con estos servicios tan insuficientes y con este horario tan malo, creo que deberían bajar por lo menos el precio del billete. Hay días que el servicio no es nada bueno y los servicios mínimos no están siendo los adecuados. Los días que tengo que hacer transbordo es una locura y tardo muchísimo tiempo en llegar a los sitios. Para un trayecto que andando son 10 minutos, suelo tardar más de media hora. Esta situación es fastidiosa sobre todo para jubilados y para los que tienen que ir a trabajar».
Antonio: «Apoyo y entiendo a los conductores»
«Yo apoyo a los conductores porque están pidiendo lo que les pertenece. Me parece muy bien que protesten como lo están haciendo. Los usuarios estamos afectados con los nuevos horarios pero ellos también, es normal que luchen por sus derechos y por sus condiciones laborales. Puede que la gente lo vea como algo perjudicial pero es que ellos también están teniendo problemas en su trabajo. Creo que la empresa debería hablar ya con ellos y arreglar el problema, así todos ganamos».
