El Instituto Aragonés de la Mujer (IAM) ha abierto una consulta pública para elaborar un decreto que regule las prestaciones económicas complementarias a recibir por las mujeres víctimas de violencia machista, con el fin de ofrecerles más ayuda ante su compleja situación personal y para que puedan retomar su vida con mayores garantías.
Según el Gobierno de Aragón, se incluyen tres líneas de apoyo económico, la primera para mujeres víctimas de violencia fuera del ámbito de la relación de pareja, la que se ejerce sobre las mujeres por el hecho de serlo y que se recoge tanto en la legislación autonómica como en el Convenio de Estambul pero que no responden al concepto de violencia de género que define la ley orgánica estatal, ha explicado la directora del IAM, Natalia Salvo.
La segunda línea es para hijos e hijas huérfanos por violencia de género y la tercera para mujeres mayores de 65 años que, tras denunciar una situación de violencia, están en una situación de especial vulnerabilidad, especialmente por la ausencia de recursos económicos estables.
Para la implementación y desarrollo de estas medidas se ha abierto una audiencia pública para recibir aportaciones al decreto que regulará estas tres líneas de apoyo.
Los sujetos y las organizaciones más representativas potencialmente afectados por la futura norma pueden hacer aportaciones hasta el 25 de agosto por internet, en el enlance http://bit.ly/2M8XTek.
Salvo ha indicado que gracias a la habilitación de los fondos presupuestarios por parte del Gobierno de España para el desarrollo y la implementación del Pacto de Estado contra la Violencia de Género en las comunidades autónomas, en Aragón se van a reforzar líneas de trabajo ya existentes y también impulsar nuevas líneas como estas.
Consciente de que la violencia machista es "uno de los problemas más graves" de la sociedad, el Gobierno aragonés ha autorizado un "importante incremento presupuestario" del IAM y de las medidas de prevención y atención integral de las mujeres víctimas de violencia y de sus hijas e hijos, concluyen las fuentes.
