El Instituto Aragonés de Gestión Ambiental (Inaga) ha emitido un informe en el que plantea condiciones medioambientales para la construcción de la presa del río Bergantes en Aguaviva (Teruel), como labores de limpieza tras los episodios de avenidas o medidas de protección a la flora y la fauna durante la construcción.

Según ha informado el Gobierno de Aragón, el informe incluye, dentro del plan de vigilancia y el plan de explotación de la presa, un seguimiento de los episodios de avenida que contemple labores de limpieza tras dichos episodios, de manera que se mantengan las características naturales del río y de sus hábitats.

Responde así a una de las preocupaciones planteadas por la población que temía que, tras un episodio de llenado y vaciado del embalse, no se retirasen los troncos y sedimentos arrastrados por la avenida.

Igualmente, el informe del Inaga señala que la obra afecta al 1,7 por ciento del LIC Río Bergantes, superficie que aumentaría en caso de inundación pero no más de un 34,1 por ciento.

El informe recoge también que parte de las zonas que sean objeto de expropiación podrán perder sus usos actuales agrarios, y esto puede permitir la recuperación de vegetación natural, especialmente en las riberas del río Bergantes, lo que supone un efecto beneficioso para el medio ambiente, según las fuentes.

El documento también analiza otros efectos de la presa, tanto durante su construcción como durante su mantenimiento posterior, y propone medidas ambientales en relación con la fauna y con el sistema hidrológico del río.

Así, destaca que en la zona donde se proyecta la presa no existen puntos de nidificación de especies catalogadas.

El informe ha sido entregado a la Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) para que lo incorpore al expediente de Evaluación de Impacto Ambiental de la citada presa, ya que ese proceso de lo realiza el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Medio Ambiente.

A través de un comunicado, la directora del Inaga, Nuria Gayán, ha destacado que "éste es un proyecto muy poco común, puesto que se pretende construir una presa sin embalsar agua" y por ello no están previstos nuevos usos del agua, de manera que la presa solamente sería utilizada "para un llenado y vaciado rápidos en caso de avenida en el río Bergantes".

Así, el informe del Inaga analiza el proyecto planteado de esta manera y si en algún momento se plantease embalsar agua, se trataría de una modificación sustancial del proyecto, dicho informe ya no sería válido y se debería repetir la evaluación de impacto ambiental.

La directora del Inaga, añade la nota, ha mantenido varias reuniones con el presidente de la CHE y el personal técnico de este organismo, y ha resaltado la coordinación.

Además, Gayán recibió el pasado mes de julio a representantes de la plataforma "El Bergantes no se toca", contraria a la construcción de esta infraestructura.

Gayán destaca en el comunicado la justificación de la laminación de avenidas por motivos claros de seguridad y de cumplimiento de la normativa en materia de presas.