El BOA publicó ayer la salida a información pública durante un periodo de un mes del plan acordado entre las farmacias y el Salud por el que alrededor del 80% de las boticas aragonesas podrán personalizar el tratamiento de los pacientes.
El sistema, de pago, permitirá al usuario --polimedicado-- obtener la medicación distribuida y personalizada a través de la entrega de un envase de plástico --el blíster-- más grande que los habituales, con diferentes cavidades en las que se introducirán las medicinas que deben tomar los pacientes.
La medida, encaminada a favorecer la adherencia al tratamiento de este tipo de pacientes, incluye que el blíster, que se rellenará semanalmente o con una periodicidad máxima de un mes, se destinará, principalmente, a pacientes mayores, polimedicados o con problemas de demencia y que, habitualmente, tienen problemas para administrarse la medicación.
En este sentido, farmacéuticos y la propia consejería vienen advirtiendo de la importancia de reducir el porcentaje de ingresos hospitalarios provocados por la falta de adherencia u otros problemas con el tratamiento en personas polimedicadas. Los farmacéuticos exponen que, en la actualidad, el 33% de estos ingresos se produce por esta causa, por lo que este sistema estaría llamado a disminuir de forma considerable ese volumen. Cataluña y País Vasco ya han implantado este sistema.
