La Guardia Civil tenía listo un amplio operativo de búsqueda con el despliegue de unidades de élite para dar con el autor o autores de los robos con violencia en la zona del Bajo Aragón horas antes de que Norbert Feher, alias Igor el ruso, asesinara a dos guardias civiles y un ganadero.

Así lo aseguró ayer el secretario de Estado de Seguridad, José Antonio Nieto, en la comisión de Interior del Congreso en la que PSOE y Podemos habían pedido explicaciones sobre el triple crimen de Teruel ocurrido en la noche del 14 de diciembre en la localidad turolense de Andorra.

Tras mostrar sus condolencias por la muerte de los agentes Víctor Romero y Víctor Jesús Caballero y por el ganadero José Luis Iranzo, Nieto expuso a la comisión un relato cronológico pormenorizado de los hechos desde el día 5 de diciembre cuando Feher hirió con arma de fuego a dos personas en Albalate de Arzobispo.

«Desde ese día 5 hasta la noche del 14, el dispositivo fue riguroso, profesional y exhaustivo», defendió el número dos de Interior, que dejó claro que la Guardia Civil en ningún momento supo que el autor de los robos en la zona y de intentar matar a dos personas era Igor el Ruso.

Así, explicó que las informaciones aportadas por estas dos víctimas, el dueño de un masico y un cerrajero, solo pudieron aportar una descripción física aproximada y con datos «muy generales», como que era un hombre alto, fuerte, con gorra y ropa de camuflaje.

BATIDA EN EL VENTORRILLO // Pese a que en los días siguientes, añadió Nieto, se hicieron patrullajes por distintas localidades como Alcañiz y que se repitieron entradas en otros masicos con el mismo modus operandi, la Guardia Civil no halló nuevas pruebas que permitieran identificar a Norbert Feher, ni siquiera que apuntaran la presencia en España de una persona con su perfil.

Sin embargo, el capitán jefe de Alcañiz ordenó un recorrido por la zona de El Ventorrillo, por la que podía estar moviéndose el autor un día antes de que se practicara «una batida más amplia», en la que además del helicóptero y una cámara nocturna iban a participar agentes del Grupo de Reserva y Seguridad (GRS) y del Grupo de Acción Rápida (GAR).

Fue horas antes, en la tarde del día 14, cuando los agentes Víctor Romero y Víctor Jesús Caballero acompañaron a José Luis Iranzo a preparar esa batida para «marcar» posibles sitios de ocultación en cuevas, unos trabajos en los que el ganadero no se expuso a ningún peligro.

Una vez terminada la colaboración, se separaron. Los guardias volvieron al cuartel de Andorra y fue después cuando fueron requeridos por un aviso de disparos.

Estas explicaciones no convencieron ni al PSOE ni a Podemos, que criticaron a Interior por infravalorar la amenaza. Desde las filas socialistas, Ignacio Urquizu denunció la falta de medios y efectivos para combatir la inseguridad en el mundo rural y reprochó que no se hicieran comprobaciones pese a haberse hallado el día 5 de diciembre casquillos del arma de Feher.