La investigación en Aragón, afortunadamente, sigue dando de qué hablar de manera positiva. Y esta vez lo hace con la puesta en marcha de un proyecto pionero que buscará tratamientos para el cáncer infantil y que se convertirá, a partir de septiembre, en la única investigación abierta en la comunidad sobre esta enfermedad.

La iniciativa, que durará cinco años, tiene el objetivo de encontrar fórmulas basadas en inmunoterapia más exitosas que las actuales contra las leucemias y el neuroblastoma, dos enfermedades que representan el 40% de los cánceres infantiles.

El plan se desarrollará gracias a una inversión de 450.000 euros aportados por la Asociación de Padres de Niños Oncológicos de Aragón (Aspanoa), el Instituto de Investigación Sanitaria Aragón (IIS Aragón) y la Agencia Aragonesa para la Investigación y el Desarrollo (Araid) del Gobierno de Aragón. La previsión es poder realizar ensayos clínicos a partir del 2023.

Seis equipos de investigación participarán en el proyecto, pero será Julián Pardo quien lidere el proceso. «Hemos creado un equipo multidisciplinar competente, porque es un proyecto complejo. Para mí es un orgullo ser de aquí y poder desarrollar algo así», aseguró. Pardo explicó que «todos» tenemos en nuestro sistema inmunitario unas células denominadas NK (asesinas naturales), que son capaces de reconocer y atacar directamente a las células cancerígenas. «Cada día nos protegen a una persona sana, pero en un niño con cáncer las NK han dejado de funcionar», explicó.

Así, Pardo detalló que las NK pierden su función «cuando el tumor aprende a esconderse de ellas» o cuando el paciente está inmunodeprimido por razones genéticas o como consecuencia de tratamiento como la quimioterapia o la radioterapia. «Lo que nosotros nos proponemos es elaborar y seleccionar unos protocolos para elegir las NK de cada paciente con cáncer, sacarlas de su organismo, manipularlas para que sean capaces de actuar ante un tumor y, por último, reintroducir las NK alteradas a su cuerpo», argumentó el investigador de Araid.

Entre 8 y 12 fallecimientos / En adultos, las primeras investigaciones de este tratamiento externo de las células NK están dando resultados prometedores, pero apenas hay estudios sobre si esta nueva terapia podría tener éxito en menores de edad.

En Aragón se producen cada año entre 2 y 4 casos de neuroblastoma, cuya tasa de supervivencia es muy baja. «No es muy frecuente, pero la mitad que son metastásicos fallecen. La inmunoterapia desarrollada antes no fue suficiente», explicó Carlota Calvo, jefa de sección de la Unidad de Oncopediatría del hospital Infantil del Miguel Servet de Zaragoza.

Respecto a las leucemias, Calvo detalló que «son las más numerosas», pero también ofrecen una supervivencia de más del 80%. «Sin embargo, hay un 20% de niños que no sabemos muy bien por dónde atajar», dijo. La doctora precisó que, aunque los primeros hallazgos se estiman para dentro de cinco años, reiteró que «en ciencia los experimentos pueden provocar cambios a mitad de camino», dijo. «Hay que ser pacientes. Las cosas pueden no ir por el camino deseado», añadió.

En Aragón, cada año fallecen entre 8 y 12 niños por cáncer y se detectan entre 35 y 45 nuevos casos. Aunque en muchos sentidos el cáncer infantil se puede considerar una enfermedad rara por su baja prevalencia, continúa siendo la principal causa de muerte por enfermedad en menores de edad.

Junto a Julián Pardo y Carlota Calvo trabajarán Antonio Pérez Martínez (investigador del hospital infantil de La Paz de Madrid), Eva Gálvez (científica titular del Instituto de Carboquímica del CSIC), Rosa del Campo (investigadora del Servicio de Microbiología del hospital Ramón y Cajal de Madrid) y Antonio Rezusta (jefe del servicio de Microbiología del Miguel Servet).

MÁS RECURSOS / El presidente de Aspanoa, Miguel Casaus, declaró que el día de ayer era «histórico» después de tantos años de reivindicaciones. «No hemos parado de pedir a las farmacéuticas más recursos en investigación, jamás hemos parado, pero no se lograba nada. Al final, decidimos dar un paso adelante y plantear este proyecto», explicó Casaus.

La asociación de padres aporta 200.000 euros a este proyecto, parte gracias a un legado de 108.000 euros de un particular que el colectivo recibió el año pasado. Además, Aspanoa, por otro lado, anunció que convocará ayudas a la investigación por un valor de al menos 60.000 euros anuales. La primera de estas iniciativas está prevista que se publique antes de que acabe este año.