Agentes de la Guardia Civil investigan a un hombre de 49 años cuyo vehículo fue detectado por un servicio de control de velocidad ubicado en la carretera N-230, término municipal de Sopeira (Huesca), cuando circulaba a 180 kilómetros por hora en un tramo limitado a 90.

Según informa el Instituto Armado, el presunto infractor, un vecino de San Boi de Llobregat, fue captado por el radar el pasado 6 de marzo en un tramo interurbano próximo a Sopeira.

Los agentes dieron el alto al conductor y le imputaron un presunto delito contra la seguridad del tráfico por circular a una velocidad superior en un 50 por ciento a la autorizada para una vía interurbana.

Las fuentes citadas señalan que la infracción supuestamente cometida por el investigado, citado para un juicio rápido, está castigada en el Código Penal con penas de 3 a 6 meses de prisión, multa de 3 a 6 meses o trabajos para la comunidad de 31 a 90 días, y privación del derecho a conducir hasta un máximo de 4 años.