Izquierda Unida (IU), Puyalón y Equo anunciaron ayer su voluntad de presentarse a las próximas elecciones autonómicas en la coalición Cambiar Aragón. Hicieron un llamamiento a Podemos para que se integre en la candidatura, algo que de momento descarta el partido. Ni siquiera ha habido contactos para ligar un acuerdo. Ante la incertidumbre, algunas voces de la dirección de IU dudaron de la conveniencia de seguir adelante con la confluencia si no se suma la formación liderada en Aragón por Pablo Echenique.

A menos de 90 días para las elecciones todo puede pasar, pero Cambiar Aragón no nace ni con la misma unión ni con el mismo brío que Ganemos Zaragoza, dos movimientos semejantes, el primero en el ámbito autonómico y el segundo en el municipal. O así parece de momento. IU, Puyalón y Equo hicieron pública su voluntad de confluir, pero ante todo mandaron un mensaje a Podemos, primero para que se reúna con ellos y segundo para que se sume.

Ni una cosa ni la otra parece que se vaya a producir. Desde Podemos explicaron ayer que existe una invitación --vía WhatsApp-- para mantener un encuentro, pero insistieron en la idea de que en el documento marco aprobado en Vista Alegre ya se puso negro sobre blanco que la formación concurría a las autonómicas con su marca. Solo si lo pide el 10% de los inscritos se abriría el debate para sumarse a la coalición, una posibilidad que debería ser sometida a votación. A día de hoy nadie ha pedido sumarse a Cambiar Aragón, según informaron ayer desde la formación.

Así que, ante la evidencia cada vez más palpable de que Podemos tenga papeleta propia en las autonómicas, en IU cunden las dudas sobre la viabilidad de una coalición que obligaría a elaborar un programa electoral y convocar unas primarias para elegir a los candidatos. No hay que olvidar que Izquierda Unida tiene ya cabeza de lista: Patricia Luquin, que ganó hace unas semanas los comicios internos de su partido.

Difícilmente se embarcará Podemos en una aventura que podría medir en unas eventuales primarias a Patricia Luquin y a Pablo Echenique. Y a otros tantos ciudadanos que decidan apuntarse. Un proceso que debería reproducirse en las tres provincias. Las dificultades son muchas, y el tiempo cada vez más escaso.

Pese a ello, Anabel Gimeno, portavoz de los movimientos que son el sustrato de Cambiar Aragón --Ateneo Zaragoza, C+ Huesca y Ciudadanos por la Unidad de la izquierda (Cuiz)-- abogó por la confluencia para poder acometer "un cambio real en las instituciones y en la forma de gobernar". "Es el momento de dar el protagonismo a la gente y de desalojar a los que nos han llevado a la situación en la que nos encontramos", dijo.

Gimeno defendió una confluencia "lo más amplia posible", y a ser posible previa a las elecciones y no posterior. "No tiene mucho sentido que varios partidos se presenten con programas electorales muy parecidos, lo más inteligente es sumar", subrayó.