La negociación de las ordenanzas en el Ayuntamiento de Zaragoza se inicia hoy con posturas coincidentes en los tributos más polémicos y que más afectan al ciudadano: el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) y la plusvalía. Zaragoza en Común (ZeC) se sentará con PSOE y CHA con la propuesta de suspender el cobro de la plusvalía en aquellos casos en los que se demuestre que se ha producido una minusvalía, es decir, que no ha habido enriquecimiento alguno. Una idea que coincide con el resto de grupos de la izquierda, que también son partidarios de congelar el IBI.
El concejal de Economía, Fernando Rivarés, explicó ayer que el impuesto de la plusvalía «será suspendido si se demuestra que ha habido una minusvalía hasta que el Gobierno de España modifique la norma». Se trata de una tasa que viene definida por una normativa estatal que cobran los ayuntamientos.
Como ya adelantó el alcalde, Pedro Santisteve, ZeC quiere elevar las bonificaciones para aquellos inmuebles con un valor catastral inferior a los 100.000 euros además de aquellos iguales o inferiores a los 150.000 euros.
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El responsable de las cuentas públicas, que propone congelar la tasa, está dispuesto a subírsela a entre 300 y 500 inmuebles con un valor superior a los 800.000 euros. Esta propuesta sigue la lógica de que «paguen más los que más tienen y menos, los que menos tienen». El concejal explicó que, elevando el tributo a las grandes empresas se evitará subírsela a los que «menos tienen» y recaudar más para destinarlo a políticas sociales y movilidad.
Desde el PSOE, Javier Trívez confirmó las coincidencias que existen entre los tres grupos de la izquierda en los dos grandes impuestos: IBI y plusvalía. «Este año no tiene porqué haber problema», aseguró. Donde pueden surgir las diferencias será en la propuesta de ZeC de elevar de forma progresiva la tasa por el uso del vertedero municipal a los municipios de la provincia. Trívez explicó que estarán a favor siempre y cuando haya un convenio con la Diputación Provincial de Zaragoza (DPZ). «Nos parece bien pero que se haga mediante un acuerdo con la diputación», precisó.
El portavoz de CHA, Carmelo Asensio, anunció su intención de pelear por que se congele el IBI y cualquier impuesto que grave al ciudadano. Además, insistió en la necesidad de atender «la situación de injusticia con la plusvalía». Asensio recordó que salió adelante la moción propuesta por su formación para suspender el cobro en los casos de minusvalía.
Entre otros motivos, la diferencia entre las negociaciones del año pasado y este radica en que este año no hay modificaciones catastrales, por lo que las conversaciones, con posturas tan similares -en la izquierda- se reducen notablemente.
Las ordenanzas municipales marcaran, eso sí, el ritmo de lo que serán las negociaciones del presupuesto del 2018. Unas cuentas clave para el devenir de la legislatura.
