Javier Regueira, autor del libro Game Over: los 13 errores que me llevaron a cerrar mi empresa, participó el jueves en Zaragoza en la jornada Gen de emprendedor. Ideas para tiempos de cambio. Este gallego de 39 años es socio codirector de la empresa Pop Up Música y profesor de distintas escuelas de negocio. Como profesional del márketing y la publicidad, Regueira trabajó en agencias como Grey o Leo Burnett.

--¿Aragón cuenta con un buen gen emprendedor?--La situación es parecida en el conjunto de España. Veo que hay reticencias porque el momento económico no es bueno y en los últimos 18 meses han desaparecido 200.000 empresas. Pero necesitamos a otras tantas personas que creen ese número de pymes porque de esta crisis no nos sacarán ni General Motors ni Telefónica.

--¿Es un buen momento para crear una empresa? --Está claro que con casi cinco millones de parados, el autoempleo es una salida, pero cualquier momento es bueno si la idea de negocio es la correcta.

--¿Si la financiación fuera más accesible se crearían más empresas? --Sin ninguna duda. La gente debe tener muy claro que es un tema capital. Yo, como cuento en mi libro, infrafinancié mi empresa y no dediqué el suficiente tiempo a buscar dinero, lo que fue un error garrafal. El jueves comentaba en la jornada a los asistentes que deberían plantearse la búsqueda de financiación como un trabajo full time durante al menos un año y algunos se reían, que es lo que yo hacía hace cinco años. Sin embargo, es algo vital y merece la pena posponer el arranque del proyecto si no se tiene ese dinero.

--¿Por qué hay tan poco espíritu emprendedor en España? --Tengo un amigo que es empresario de éxito y siempre dice que en España no tenemos escuelas de emprendedores. Yo por ejemplo estudié en una escuela de negocios en la que nos enseñaba a ser directivos o a trabajar por cuenta ajena, pero no aprendíamos lo que se necesita saber para hacerte empresario. En ese sentido, creo que hay una laguna educativa muy grande.

--¿Escribió un libro de 113 páginas para explicarlo, pero cuáles son los errores más habituales a la hora de montar un negocio? --La conclusión que extraje tras escribirlo fue más de índole personal y emocional que profesional. Pienso que tenemos un ego muy grande porque estamos programados y educados para tener éxito y ser reconocidos por la sociedad. Por eso, en cuanto las cosas se tuercen cuando montas una empresa, algo que al principio es inevitable, te pones muy nervioso y no te planteas ni siquiera la posibilidad de fracasar, por lo que sigues adelante. Y es ahí cuando viene el verdadero riesgo porque los problemas, las deudas y la crispación van a más.

--En otros países se ve el fracaso como un proceso más del emprendimiento. --Y así debería ser en España porque se puede aprender mucho. Sin embargo, aquí el fracaso está totalmente estigmatizado. En otros países como EEUU se enseña que no es algo malo caerse y que es algo consustancial a la naturaleza humana.

--Usted también se cayó y aquí está. --Eso es. Se trataba de una cadena de restaurantes con carta sana y natural orientada a ejecutivos que tienen poco tiempo para comer. Nos lanzamos un pequeño grupo de inversores y el primer local lo montamos a finales del 2005 en una calle secundaria de Madrid. Fue muy bien hasta que nos volvimos demasiado valientes y abrimos otros dos en el plazo de un año. Ahí empezaron los problemas. No solo por la crisis, aunque las ventas cayeron un 20%, también por los errores que ya he comentado.

--¿El apoyo desde las administraciones es suficiente? --Para nada. Yo en concreto no tuve ninguno. Este es el gran reto de los gobiernos porque tienen que ser las pymes las que tiren del carro. Además de orientación y ayuda teórica se necesitan subvenciones y créditos blandos.