El Reino Unido mantendrá el apoyo a Gibraltar "implacable como una roca", según ha declarado el ministro de Asuntos Exteriores británico, Boris Johnson, en uno de sus habituales juegos de palabras, después de que la Unión Europea asumiera las tesis de España sobre la colonia en la negociación del 'brexit' y esgrimiera el posible veto de España si Theresa May y Mariano Rajoy no se ponen de acuerdo previamente sobre el futuro de la Roca. El comentario de Johnson se produjo en la noche del viernes, después de mantener una conversación telefónica con Fabian Picardo, ministro principal del Peñón.

Picardo ha acusado a España de urdir una propuesta "innecesaria, injustificada e inaceptable", que califica como "un lamentable intento de manipular al Consejo Europeo, en aras de sus propios y estrechos intereses políticos". "El 'brexit' es ya lo suficientemente complicado, sin que España lo complique aún más", ha añadido. Al Gobierno británico la exigencia española, respaldada por la UE, le ha pillado completamente por sorpresa. "Estoy muy satisfecho de haber hablado con el ministro principal, Fabian Picardo. Como siempre, el Reino Unido sigue apoyando a Gibraltar implacable como una roca", señaló Johnson en un tuit.

Una fuente británica al tanto de la negociación con la UE citada por el diario 'The Guardian' aprecia que la cláusula sobre Gibraltar, introducida en el borrador de las negociaciones de la UE, es extraordinaria porque viene a negar la soberanía de los británicos sobre la Roca y le da mayor voz a España sobre el futuro de Gibraltar, de la que el Gobierno británico está dispuesto a aceptar. La eurodiputada de Gibraltar, Clare Moody, culpa a Theresa May por no haber mencionado a la colonia en su carta para activar el artículo 50. Esa circunstancia, entiende Moody, habría envalentonado a los españoles al ver que Londres no concedía igual importancia a Gibraltar que a Escocia o Irlanda del Norte. "Es terrible y un ejemplo de la falta de cuidado con la que el gobierno está llevando en general esta negociación", critica Moody.

La disputa sobre Gibraltar alcanza también a la República de Irlanda.El Sinn Féin acusa de pasividad al Gobierno de Dublín, que no ha sacado pecho por Irlanda del Norte en el borrador de la UE. "España se ha asegurado el protagonismo sobre el futuro de Gibraltar, al conseguir garantías de que cualquier cosa que se acuerde en el futuro debe ser aceptable para España. El Gobierno irlandés, por su parte, no ha conseguido algo así sobre el futuro del norte de Irlanda", señala Peadar Tóbín, diputado del Sinn Féin. "Hay mucho en juego", en Irlanda del Norte recuerda el republicano, "el proceso de paz y un millón de ciudadanos irlandeses, que quedarán aislados, fuera de la UE".