--¿150 títulos son muchos?

--En 20 años. En los primeros diez se publicaron un tercio de los 150 títulos, y en los siguientes diez se hizo el resto, donde más influencia hemos tenido.

--Precisamente celebran el aniversario con una obra de un autor sevillano. ¡Hombreeee!

--Ja, ja. Los aragoneses han tenido y tienen mucha presencia en la colección y nos invita a ser respetuosos con los de fuera. Pero sobre todo es que me llegó Creadores del creador, que me pareció una obra fantástica para celebrar el aniversario.

--¿Próximas novedades?

--Sí, la editorial no deja la narrativa sino que cambia el formato, cuyo número uno será un autor aragonés, Javier Gracia. Es un profesor jubilado que ha vendido mucho con La niebla del olvido, unas memorias de un maestro en la España franquista, con una herencia republicana. Ahora editaremos una serie de relatos, de línea social.

--¿Está sana la editorial, se lee en Aragón?

--Aragón está entre los terceros o cuartos de lectores a nivel nacional. A eso han contribuido las nuevas editoriales, donde cada una cumple su papel. Y los nuevos autores aragoneses. Somos un lobby nacional, con autores de gran proyección: algunos de ellos comenzaron en mi editorial.

--Ya que le tengo aquí: ¿ha calado la Feria del Libro?

--La Feria del Libro de Zaragoza es la más importante de España después de la de Madrid. Todos los autores quieren venir a Zaragoza. Instalarla en el paseo Independencia, poner la carpa, ha supuesto la reactivación de algo que necesitaba consolidarse. El salón de los libros es el Paseo Independencia, y se ve el 23 de abril donde hemos logrado que esté colapsado completamente.

--¿Teme la llegada del e-book?

--No, porque todas las cosas conviven...

--La gente se bajará los libros de internet... como las canciones.

--Se bajarán pagando. Google está preparando un sistema para bajar los textos con seguridad. Pero convivirá con el libro en papel; no se puede reproducir un libro infantil, un libro de gran formato... Tiene inconvenientes, porque pierdes el e-book y has perdido tu biblioteca. El consumidor de libros no tiene nada que ver con el consumidor de música.

--Está todo en el aire, pero quieren vender el cacharrico.

--¡Claro! El cacharrico quieren venderlo como sea, pero de momento hay una guerra entre formatos, lo que favorece al libro. De entrada la campaña de Navidad ya les falló estrepitosamente. Un aparato sin conexión a internet no sirve para nada. Y hay que aclarar el concepto de derechos de autor para los escritores.