El portavoz del PP en el Ayuntamiento de Zaragoza, Jorge Azcón, tiene claro que Ciudadanos será el primer partido al que pida apoyo si vence en las próximas elecciones municipales, pero duda de que acepte porque, asegura, la formación naranja "se siente más cómoda pactando con el PSOE" en Aragón.

Azcón reconoce en una entrevista concedida a Efe que tiene "muchas posibilidades" de ser el candidato del PP en los comicios locales del año que viene, aunque apela en última instancia a la "cautela" para no declarar que cuenta con "todas" las opciones.

Desde esa casi convicción de que será el cabeza de lista de los populares, planteará un programa electoral para la capital aragonesa basado en dos principios esenciales, acordes con dos necesarios debates que a su juicio no se han producido durante esta legislatura municipal, que considera "acabada". "Y eso puede ser que sea lo mejor que le pase a la legislatura", apostilla.

La apuesta por las nuevas tecnologías, de modo que en 2025 Zaragoza sea la ciudad con mayor inversión en, por ejemplo, la aplicación de sistemas inteligentes para el alumbrado; y la búsqueda de la eficiencia energética sobre la base del respeto medioambiental serán las dos puntas de lanza de su proyecto.

Pero justo al lado de estas dos banderas Azcón enarbolará la renovación de la flota de autobuses para que sean eléctricos; y la modificación del plan de ordenación urbana, ya que el vigente data de 2002 y Zaragoza es hoy una ciudad radicalmente distinta.

Aclara que en su listado de prioridades no está ni estará la línea 2 del tranvía.

Todo ello se podrá financiar, afirma, con una tesorería sin las "mamandurrias" que en su opinión han caracterizado la gestión de Zaragoza en Común, sustentada en dar dinero público a organizaciones afines a (cuando no creadas por) concejales y concejalas del actual equipo de gobierno del alcalde, Pedro Santisteve. También apunta a que la mejora económica flexibilizará la disponibilidad financiera.

En estos puntos, y resumidamente, se asienta el proyecto que Azcón quiere implantar en Zaragoza, una ciudad que, dice, "ha perdido el tiempo" durante estos tres años de gobierno de ZeC. "Ha sido una legislatura en blanco", puntualiza.

Añade el portavoz del PP en el consistorio que Santisteve y su equipo han estado más pendientes de alentar "la confrontación" con sus socios municipales, PSOE y CHA, y con agentes externos que de "resolver los problemas de los ciudadanos".

Para el edil de los populares, ni la ciudad se encuentra económicamente saneada, pues muestra el mayor índice de deuda por habitante, ni se han reparado problemas enquistados, entre otras razones porque los presupuestos, que se han ido aprobando gracias a la alianza de ZeC, PSOE y CHA, "sirven para poco aparte de para subir impuestos, porque pasan los años y no se ejecutan".

Además, según sus palabras, "la calidad democrática ha empeorado sensiblemente" desde 2015 como se pudo constatar, señala, en la decisión de Zaragoza en Común de eliminar la opción de voto de los grupos de oposición en las sociedades municipales.

Es ésta una decisión "muy grave" que resume así: "Como el alcalde perdía votaciones en las sociedades municipales, pues es el Gobierno de Zaragoza con menor respaldo de la democracia, se tiró rodando por la pendiente y quitó las votaciones".

Jorge Azcón mira al PSOE cuando se pregunta cómo se ha podido llegar a la situación que describe en la entrevista, aunque manifiesta que no es la única causa.

Según afirma, el Partido Socialista es el que "tiene que explicar cómo se puede soplar y sorber al mismo tiempo" por cuanto, tras la decisión de ZeC de cambiar el funcionamiento de las sociedades municipales, los socialistas que lideran Carlos Pérez Anadón en el Ayuntamiento apoyaron los presupuestos. Unos días después, añade, secundaron la reprobación a Santisteve.

La razón para el portavoz del PP radica en la existencia de un acuerdo entre PSOE y Podemos para "seguir en los sillones" del Gobierno de Aragón y del Ayuntamiento de Zaragoza, respectivamente.

"Un pacto a puñetazos", describe, que genera una consecuencia: que en el consistorio "no prospera una moción de censura contra Pedro Santisteve porque hay que aguantar el sillón de Javier Lambán".

De nuevo sobre su casi segura candidatura y su proyecto, Azcón reclama reivindicar "la importancia" de lo que el Gobierno del PP ha hecho en Cataluña, a su entender. Argumenta que la aplicación del artículo 155 ha convertido en "quimera" los "sueños independentistas".

Sin embargo, a tenor de los sondeos electorales que se han ido conociendo desde las elecciones catalanes de diciembre, el que se beneficia de la lucha contra el independentismo es Ciudadanos, partido cuya actitud Azcón critica.

Por un lado, asegura que es un partido que "tiene que demostrar todavía muchas cosas".

A su juicio, propone "cosas que suenan bonitas, ideales y fantásticas" gracias a que no atesora experiencia de gestión.

"Hasta que te enfrentas a una experiencia de gobierno no sabes lo que eres capaz de hacer", manifiesta antes de sentenciar que en la pugna de las formaciones de centro-derecha "queda mucho partido".

Por otro lado, según sus declaraciones, "Ciudadanos, en Aragón, en el ámbito autonómico, se siente más cómodo pactando con el PSOE" hasta el punto de que en la comunidad ha sido capaz de "llegar a acuerdos con el Lambán más 'podemita'".

Son ejemplos, en su opinión, las posiciones de PSOE y de Ciudadanos en el consejo de administración de CARTV, para detener una moción de censura en Fraga o respecto del Impuesto de Sucesiones.

Así que, si gana las elecciones de 2019 en Zaragoza, Azcón buscará a Ciudadanos el primero. "Pero no tengo tan claro que apoye al PP antes que al PSOE", concluye.