--¿Cuál es balance de situación de la corporación tras dos años de crisis?

--Las empresas de la corporación no son ajenas al mercado. Tenemos las alegrías y tristezas que el resto. Hay muchos problemas y muy variados. Se ha pasado de una gestión de vacas gordas a una de vacas flacas. Además de una forma muy rápida porque se tardó en un tiempo en ver venir la crisis. Nosotros lo que estamos haciendo es ordenarlo todo y buscar fórmulas para aprovechar a los profesionales que tenemos.

--¿En qué fase están ahora en esa remodelación?

--Ya se ha hecho toda la reestructuración. Las empresas se han puesto en orden, por sectores y objetivos estratégicos. Se han creado seis grupos con proyectos, con sinergias claras. Tenemos líneas verticales, que se gestionan con los comités de gestión de sector y además se han hecho confluencias horizontales para funciones comunes entre las compañías.

--¿Y esta reestructuración tiene un punto final?

--Nada tiene un punto final. Nuestro objetivo es que todas las compañías se consideren como parte de un grupo.

--¿No se trabajaba como una corporación hasta ahora?

--En casos puntales. Era posible que dos empresas negociasen su financiación, incluso en el mismo sector, de forma separada. Quizás se puede contratar el servicio de telefonía para todos. Es más eficiente que hacerlo por separado. Se trata de que todo el mundo se ponga la camiseta del grupo sin quitarse la de su empresa.

--¿Cuánto quiere ahorrar? Porque eso no lo han dicho.

--Es complicado. Solo por el hecho de hacer un grupo consolidado fiscal ya nos hemos ahorrado un millón y medio de euros en impuestos. Cuando se puedan hacer ahorros de gestión, los logros serán importantes. Queremos hacer un trabajo de optimización de costes para bajarlos.

--¿Aspiran a ganar dinero?

--En el último ejercicio hemos perdido 12 millones de euros. Pero ha sido porque hemos tenido que depreciar los valores de algunas compañías. A largo plazo es deseable un equilibrio. Pero hay que tener en cuenta que si la corporación tiene una empresa con pérdidas, pero que están justificadas por el fin que se persigue, no tiene por que ser malo. Podemos soportar pérdidas porque el beneficio social lo compensa. Pero no tendríamos que tenerlsd.

--¿Cuánto personal se ha reducido?

--Ha habido reducción en algunas empresas concretas. Pero la ordenación nos obligará a plantearnos nuevos esquemas de personal. El balance final será netamente a la baja.

--No dicen cifra, veo.

--Se verá al final.

--¿Se han vendido ya las compañías energéticas?

--No. Existe una decisión tomada de vender nuestras participaciones en el sector porque nuestra presencia no aporta nada. Esas sociedades nos dan dividendos. Solo se ha vendido una, que no nos daba beneficios porque era una planta experimental.

--¿Ese plan de organización no contempla medidas para que la corporación sea menos opaca?

--Yo creo que hay cosas objetivas y subjetivas. Las subjetivas se pueden discutir hasta la eternidad. Pero cuando alguien está empeñado en no entenderse resulta complicado llegar a un acuerdo. Desde que yo estoy en la corporación he comparecido tres veces en las Cortes y se han hecho dos informes anuales, a los que no estamos obligados. No estamos aquí para ser opacos. Se han ordenado todas las empresas, se han auditado, las hemos puestos por sectores, por objetivos, se han especificado los consejeros... No encontrará ninguna comunidad autónoma que, ni de lejos, tenga la transparencia que hay aquí. --¿Se encontraría más cómodo con el PP en los consejos de administración?

--Ni yo ni la corporación tenemos nada que ocultar así que no estaría ni más ni menos cómodo con consejeros de partidos de la oposición. Los consejeros tienen acceso a determinada información. Lo que pasa es que disponer de esos datos impediría realizar cierta crítica genérica. Y esa parte también la entiendo. No me parece justo no entrar para poder criticar.

--¿Han descartado ya la fusión entre Sirasa y Sodemasa?

--No. Ni ninguna otra. Cualquier movimiento que nos permita ser más eficientes, lo haremos. Pero su fusión no implicaría necesariamente una reducción de los costes. Quizás seamos capaces de capturar algunas sinergias sin llegar a la fisión jurídica.

--¿Se ha parado por cuestiones políticas?

--Que cada una dependa de una consejería tiene un impacto.

--¿Quiere decir dificultades?

--Sería más fácil si las dos fueran de la misma consejería. Pero debemos ser capaces de llevar una gestión común de ambas en lo que se pueda.