El juez Alfredo Lajusticia, que instruye el sumario por la presunta trama de corrupción urbanística en La Muela, ha ordenado investigar las cuentas de la agencia de viajes Sauco, propiedad de un amigo personal de la alcaldesa ahora encarcelada, María Victoria Pinilla. Esta agencia se ha encargado de la mayoría de las expediciones que, a través de la Sociedad Municipal Cultural y Deportiva, se vienen organizando en el municipio desde el año 2002 y que han contado con cuantiosas subvenciones para todos los vecinos que estaban empadronados.

El instructor ha enviado un oficio a la delegada de la Agencia Tributaria en Aragón en el que solicita los ingresos y pagos declarados por la empresa de Emilio Lobera Martínez, procedentes de clientes y proveedores entre los años 2002 y 2008, así como sus cuentas bancarias. La Policía ha detectado, en las múltiples conversaciones grabadas a algunos imputados en el caso, posibles irregularidades en la facturación.

LUGARES PARADISÍACOS La organización de estos viajes, con destino a lugares lejanos y paradisíacos, ha estado siempre bajo sospecha, al menos entre las empresas del sector que siempre perdían los concursos a favor de la misma agencia porque ni siquiera podían acceder a las condiciones que ponían.

Estos viajes se iniciaron en el 2002 pero no fue hasta cuatro años más tarde cuando se sacaron a concurso. Los viajes eran, inicialmente, anuales y se fijaron destinos como República Dominicana, Cancún, Brasil o Argentina.

El éxito de las convocatorias, algunas de las cuales tenían una financiación del 50% para los empadronados en el municipio, provocó que se ampliara a otras más a lo largo del año, a lugares como Benidorm, las islas griegas o Canadá. En esas expediciones llegaron a viajar también mandos de la Policía y de la Guardia Civil en Aragón, amigos de la alcaldesa.

Según fuentes del sector de viajes en Aragón, los concursos salían sin precio máximo de licitación y la descripción de las bases técnicas era tan concreta que "solo se ajustaba a las plazas que previamente tenía reservadas una agencia concreta", indican. Estas fuentes citan el viaje para los mayores que se hizo a Benidorm. En ese caso, la descripción del pliego de condiciones era tan precisa que la reserva solo podía hacerse en un hotel concreto y en unas habitaciones determinadas.

TODO AMAÑADO "Lo curioso es que cuando querías hacer la reserva, ya estaba bloqueada, incluso antes de que se hiciera público el pliego, por una agencia de viajes de Zaragoza que era la que finalmente se lo llevaba", añaden. Y se refieren también al crucero por Grecia, en el que la naviera tenía ya la firma de reserva y el depósito nada más publicarse las bases del concurso. Asimismo, resaltan que en La Muela, donde se realizaban al menos dos viajes al año, se llegó a abrir una agencia (Viajes La Muela) que en febrero de este año tuvo que cerrar al no ser rentable.