Inspectores de la DGA y agentes de la unidad adscrita de la Policía Nacional colaboran, desde principios de año, velando por que los establecimientos de hostelería cumplan con la ley antitabaco, especialmente los jueves, viernes y sábados por la noche. Así lo explicó ayer el director general de Salud Pública del Gobierno de Aragón, Francisco Sancho, en vísperas de la conmemoración, el próximo 31 de mayo, del Día Mundial sin Tabaco.

Antonio Canales, jefe del servicio de Drogodependencia y Vigilancia añadió que, aunque se puede hablar en general de "buen cumplimiento de la norma", se había detectado que algunos de estos locales, sobre todo lugares "de juego y bares de copas nocturnos" se estaban "relajando". Si bien durante los cuatro primeros meses del año se han llevado a cabo 4.824 inspecciones, Canales puntualizó que fuera del horario habitual se realizan "dos o tres al mes".

Que los funcionarios del Ejecutivo vayan acompañados de miembros policiales obedece a que, como apuntó Sancho, "no es lo mismo visitar una cafetería a las 10 de la mañana, que hacerlo a las 2 de la madrugada". El director general, que informó de que en la provincia de Huesca aún no se había llevado a cabo ninguna inspección, declaró, eso sí, que no se ha producido ningún incidente.

LA NORMA FUNCIONA En cualquier caso, la estadística "corrobora" el seguimiento de una norma que entró en vigor en enero del 2012: durante ese año se realizaron 16.044 inspecciones, más que nunca, y solo el 1,3% detectó alguna incidencia, frente al 4,3% del 2011. Las anomalías fundamentalmente fueron por deficiente señalización y "muy pocas" por consumo de tabaco.

Un hábito que no para de decrecer en el mundo y también en la comunidad, si bien los responsables sanitarios expresaron ayer su preocupación porque este descenso no se refleja entre las mujeres. De hecho, vaticinaron que en el 2015 habrá más muertes por cáncer de pulmón vinculado al tabaquismo, que por cáncer de mama. El director general de Salud Pública manifestó que, pese a que el consumo de tabaco baja --en Aragón fuma el 26,9% de la población, dos puntos más que la media nacional--, las proporciones de fumadores entre hombres y mujeres se han ido igualando con el paso del tiempo.

Así, si en 1978 el reparto era 80%-20%, en la actualidad la proporción es casi del 50% para cada género. También preocupa a los responsables médicos la edad a la que los jóvenes se inician en este hábito, que representa la primera causa de mortalidad en el mundo. En Aragón, se empieza a fumar a los 13 años.