Los colectivos en defensa de la escuela pública temen que las medidas anunciadas por el Gobierno de Aragón supongan que "muy probablemente" la enseñanza concertada albergue a un mayor número de alumnos que la pública en un futuro no muy lejano. La impresión se sostiene, fundamentalmente, en la aplicación de la zona única que el Departamento de Educación planea introducir en los procesos de escolarización a partir del curso 2013-14. "Esa especie de zona única con la que pretenden la libertad total de elección de centros en Zaragoza y la concertación de todas las unidades que los padres quieran provocarían una falta de control, un gasto inútil y huecos en la pública", expuso José Luis Cimorra, portavoz de la Plataforma en defensa de la Escuela Pública.

En este sentido, Cimorra avisó de la necesidad de "poner coto" a la decisión de los padres a la hora de elegir centros, ya que "se podría llegar al extremo de acumular centros vacíos y, sin embargo, que en otros se superaran ampliamente las ratios de alumnos por aula" y abogó por "evitar ese despilfarro".

La plataforma llega a afirmar que la situación se puede revertir "a corto o medio plazo", ya que a la zona única se unen otras circunstancias favorables a la concertada. "Se están dando más competencias económicas a la concertada en detrimento de la pública, a los que también se dejarán de otorgar programas en beneficio de la privada", indicaron.

Actualmente, aproximadamente el 60% de los alumnos de Zaragoza estudian en centros públicos y el 40% lo hace en privados, mayoritariamente concertados. La ventaja de la pública se ha sustentando en los últimos años, gracias a la construcción de nuevos colegios en zonas de expansión. En Aragón, la ausencia de concertados en zonas rurales eleva el porcentaje de los públicos hasta los dos tercios del total del alumnado. "Pero la situación en Zaragoza se puede dar la vuelta si esto sigue así y, sobre todo, si se otorga esa libertad absoluta de elección que nunca antes se ha dado", explicaron desde el colectivo.