La Junta de Castilla y León convocó ayer a algunos de los propietarios de tierras en Borobia y colectivos afectados por el proyecto de la explotación minera, a cielo abierto, que se pretende abrir en esta localidad soriana. El objetivo del encuentro era marcar la zona donde se pretendería ubicar dicha mina. El encuentro se tuvo que aplazar a causa del mal tiempo.

En medio de un importante temporal de nieve y hielo, los propietarios de tierras afectadas, la mayoría de edad avanzada, se vieron obligados a intentar acudir al lugar de la convocatoria, a más de 1500 metros de altitud, a pesar de la ventisca y con el terreno nevado y helado. Uno de los vehículos derrapó, debido al hielo y la nieve, y se quedó atrancado en un camino, con el consiguiente peligro para sus ocupantes. Ante esta situación, el representante de la administración de la Junta de Castilla y León, Fernando Muñiz, tuvo que suspender el acto ante la imposibilidad de llegar al paraje El Tablado, lugar de la convocatoria, a causa del temporal de nieve y hielo, ya que los caminos estaban intransitables. Algunos de los propietarios convocados han acudido con carteles-sobre donde se podía leer Mina no.

También se desplazó hasta el lugar el secretario de Organización provincial de Izquierda Unida de Aragón, Jesús García Usón, que acompañó a los afectados por la instalación de la mina. "La empresa minera, con el beneplácito de la Junta de Castilla y León, ha retomado los trámites administrativos tras un primer éxito de la presión ciudadana que logró paralizar el primer proyecto", lamentó.