La carretera N-232 se cobró ayer una nueva vida, la sexta en lo que va de año en accidentes de tráfico registrados en los tramos sin desdoblar de esta vía que discurren por Aragón.

El siniestro se produjo a las 8.35 horas en el kilómetro 270 de la carretera, en el término municipal de Pedrola, cuando colisionaron frontalmente una furgoneta que circulaba en dirección a Logroño y un camión que transitaba en sentido Zaragoza. Como consecuencia del choque falleció I. Y. G. G., ocupante de la furgoneta, mientras que E. G. P., que viajaba a bordo del mismo vehículo, sufrió lesiones de carácter grave por las que ue evacuado a un centro hospitalario. El chófer del tráiler resultó ileso.

El siniestro provocó el corte de la N-232 a lo largo de casi dos horas. La Guardia Civil de Tráfico reguló la circulación y desvió los vehículos que llegaban a la zona por la carretera local Z-525.

SEIS Esta es la sexta víctima mortal que se produce en lo que va de año como consecuencia de un accidente de circulación en los tramos sin desdoblar de la carretera N-232. Tres de ellos perdieron la vida entre Figueruelas y Mallén y otros tres fallecieron en siniestros registrados en el itinerario que va de la capital aragonesa hasta la provincia de Castellón por la Ribera Baja, el Bajo Aragón y el Matarraña.

El desdoblamiento de esos 190 kilómetros de carretera convencional para convertirlos en autovía llevan años siendo una de las principales reivindicaciones de los alcaldes de la zona y de los partidos que se sitúan en la oposición. Sin embargo, ni los gobiernos del PSOE ni los del PP han tomado ninguna decisión práctica --aunque sí han coincidido en lanzar promesas que nunca se materializaron-- para mejorar esa vía con el objetivo de reducir la siniestralidad que genera.

Ocurre lo mismo con el tramo de la N-II entre Alfajarín y Fraga, en el que este año han muerto ya nueve personas.