La Organización de Naciones Unidas (ONU) quiere promover el objetivo internacional de que el acceso universal a los servicios básicos del agua se cumpla en la Cumbre Río+20, pero "no es fácil y por eso se negocia la declaración" que saldrá de este evento que se celebrará en junio.

Este es uno de los retos de la ONU para este año y sobre el que la directora de la Oficina de Naciones Unidas para la Década del Agua, con sede en Zaragoza, Josefina Maestu, recordó ayer que en el 2010 el acceso al agua "se aprobó como un derecho fundamental, pero algunos países no lo ven tan claro y no solo tiene que ser un derecho universal, sino que debe verse en la práctica".

Maestu anunció que para avanzar en esa declaración final que se aprobará en la cumbre de Río+20 se celebrará un diálogo previo con las agencias de la ONU con representación en España y se presentará el informe sobre sostenibilidad del secretario general de la ONU, Banki Moon. Esta cita tendrá lugar el día 16 en la oficina de la Casa Solans.

Durante la presentación de la memoria 2010-2011, Maestu incidió en que la gestión del agua es "clave" en todos los países para entrar en el proceso de desarrollo económico". Abogó por "conseguir que los gobiernos y los actores sociales den importancia a la gestión del agua" al lamentar que hay países que no disponen del acceso al agua y al saneamiento y no les conceden prioridad.

Entre los elementos que cuenta esta oficina para llevar a la práctica ciertas acciones, Maestu se refirió a la web www.un.org/waterforlifedecade que calificó de "clave" al igual que el Centro de Documentación del Agua que se presentarán en breve aunque funcionan desde que abrió esta oficina.

Maestu también destacó la importancia de trabajar con agentes locales y el partenariado con el Ayuntamiento de Zaragoza y la DGA, además de Cruz Roja, Ecodes y el Fondo de Cooperación del Agua.