La Policía ha revisado exhaustivamente en los últimos días al público y los profesionales que han acudido al Congreso Iberoamericano de la Cultura en el Palacio de Congresos de la Expo, hasta rayar la intromisión en el derecho a la intimidad, según fuentes jurídicas consultadas.

Los agentes, para prevenir incidentes en el interior del recinto --al que hoy acuden el Príncipe Felipe y el ministro de Cultura, José Ignacio Wert--, llegaron a pedir a algunos que se levantasen el jersey o las chaquetas y mostraran sus camisetas, al parecer en busca de algún lema sospechoso que indicase que podían protagonizar algún alboroto.

Fuentes oficiales de la Jefatura Superior de Policía de Aragón declinaron ayer comentar estas actuaciones.

Por su parte, varios juristas consultados coincidieron en calificar este tipo de actuaciones como una "intromisión en el derecho a la intimidad" de los asistentes. Según explicó un letrado, "mientras no atente contra la salud pública, uno puede llevar en la camiseta los mensajes que quiera. Si luego altera el orden en el interior, ya lo detendrán, pero no se puede hacer preventivamente".

Otras fuentes consultadas recordaron que ante este u otro tipo de actuaciones en las que el ciudadano considere que la Policía se extralimita en sus funciones, el funcionario en cuestión tiene obligación de identificarse --al igual que el ciudadano--, mediante su número de placa. Con él, pueden presentar posteriormente una reclamación si consideran que han vulnerado alguno de sus derechos.